Amenazas de ruptura en la negociación de la izquierda andaluza para concurrir a las elecciones del 19 de junio bajo una candidatura de unidad. Las turbulencias de última hora vienen por la falta de acuerdo sobre el candidato que se medirá con Juanma Moreno en las urnas. Mientras IU, Más País, Iniciativa del Pueblo Andaluz y Equo abogan por la portavoz parlamentaria de IU, Inmaculada Nieto, que este jueves ha sido bendecida como candidata por Yolanda Díaz, Podemos insiste en su condición de situar como cabeza de lista al diputado y guardia civil Juan Antonio Delgado.

El plazo para el acuerdo alcanza en la medianoche del viernes al sábado, y desde Podemos asumen que, de haberlo, el pacto llegará en los últimos minutos. Mientras tanto, continúan manteniendo encima de la mesa su apuesta por Delgado, al que sometieron a primarias para dotarle de "legitimidad" de cara a la negociación. Aunque en el proceso interno no contó con ningún rival de peso, en Podemos se emplean estos resultados para imponerlo al resto de fuerzas; algunas voces moradas ya apuntaban estos días en que Delgado debía ser candidato porque, además de ser una figura "transversal", era el único dirigente que había sido elegido.

Mientras las posiciones siguen enconadas en este punto, distintas fuentes de la negociación aseguran que Podemos ha amenazado con romper e ir en solitario si la candidatura unitaria no está encabezada por el diputado gaditano. Algunas voces moradas niegan la mayor, alegando que hay más elementos en la mesa de negociación, como el reparto de la lista o de recursos económicos.

Aunque Podemos aceptó a regañadientes la marca de la coalición Por Andalucía, que eliminaba todo rastro de la formación morada, El Periódico de España ya avanzó que mantendrían su apuesta por situar al frente a su candidato. A última hora de este jueves, los morados insistían en situarle al frente de cualquier lista de unidad. En caso de que los morados renunciaran a Delgado, habrían de obtener una contrapartida mayor, a nivel recursos o representación. Un extremo que no habría sido suficientemente satisfecho.

El resto de fuerzas consideran que el intento de Podemos por llevar al límite las conversaciones responde a una estrategia de presión para hacerles ceder y que los morados mantengan un papel principal dentro de la coalición. La realidad es que el partido liderado por Ione Belarra no pasa por su mejor momento en Andalucía: a la ruptura de quien fuera su líder, Teresa Rodríguez, que se presenta por Adelante Andalucía, y a la salida de cuadros que conllevó, se suma la debilidad de la formación allí, tanto a nivel orgánico, con una secretaria general, Martina Velarde, prácticamente desconocida, como a nivel de representación territorial.

La fuerte capilaridad de Izquierda Unida en Andalucía, con una histórica red de federaciones y presencia en centenares de ayuntamientos, contrasta con la falta de representantes de Podemos en las instituciones andaluzas y la carencia de una organización fuerte. En estas circunstancias, Podemos busca asegurar su peso en los próximos comicios para garantizar su supervivencia y evitar quedar diluidos en la coalición.

Yolanda Díaz

Advierten en Podemos de la gran importancia de esta negociación, puesto que el acuerdo que se alcance en Andalucía sentará las bases de cómo será la candidatura a nivel nacional que prevé construir Yolanda Díaz. Este escenario es "el primer proyecto piloto" del futuro proyecto nacional de la vicepresidenta segunda del Gobierno, y Podemos busca marcar perfil frente a la intención declarada de Díaz de elaborar una candidatura alejada de partidos y más apegada a la sociedad civil.

En caso de que los morados renunciaran ahora a liderar la candidatura andaluza, sentaría un peligroso precedente para el partido, que podría ver amenazada su posición hegemónica dentro del espacio. Advierten algunas voces de Podemos que, en caso de no salir adelante el acuerdo entre las distintas fuerzas de izquierda, no solo se perdería de cara a las elecciones de junio, sino que también afectaría negativamente al proyecto nacional de Yolanda Díaz.

Si la amenaza se cumpliera y Podemos concurriera finalmente en solitario, la construcción del llamado 'frente amplio' de la gallega para las próximas generales quedaría herido antes de nacer. Más aún cuando Díaz ha desembarcado en Andalucía con el objetivo de acercar posturas, poniendo su imagen para apoyar a Nieto. La falta de un acuerdo entre las distintas fuerzas implicaría, de esta forma, su primer fracaso como candidata del espacio.