El cambio en el Convenio de Cooperación para la Defensa de 1988, que regula el uso compartido de las bases de Rota (Cádiz) y Morón (Sevilla), para incluir el "estacionamiento permanente" de dos nuevos buques de guerra estadounidenses y todo el personal adicionalcontará con el refrendo del Congreso y del Senado. Esta la previsión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la valoración que hacen en las filas socialistas. La ampliación del convenio es una de las peticiones que el mandatario estadounidense, Joe Biden, hizo al jefe del Ejecutivo en la reunión que este martes mantuvieron en Moncloa, aprovechando que asiste a la cumbre de la OTAN en Madrid.

Para que la presencia de dos nuevos destructores sea una realidad, deberá aprobarlo primero el Consejo de Ministros y ratificarlo después las Cortes Generales. En una entrevista la mañana de este miércoles con La Ser, Sánchez se mostró "convencido" de que "lo vamos a sacar", a pesar de que se trata de un asunto que puede provocar fricciones internas en el Gobierno, entre el PSOE y Unidas Podemos, y con algunos de sus socios habituales como ERC y EH Bildu, que son formaciones, al igual que los 'morados', de marcado carácter antimilitarista.

El presidente dio prácticamente por hecho que el PP lo apoyará porque aunque mantiene una "oposición destructiva", en este asunto "entiendo que no va a haber problema". El respaldo de los populares, que su secretaria general y portavoz parlamentaria, Cuca Gamarra, también ha dado por seguro, garantiza que el Ejecutivo pueda sacar adelante esta variación del convenio militar con EEUU, que permitirá a los estadounidenses reforzar su presencia en Europa. En el grupo socialista contaban con este aval ya que, aseguran fuentes del PSOE a este diario, que "siempre es lo que han hecho en materia de defensa". Lo contrario, añaden, sería "una novedad".

Mensaje a Unidas Podemos

Pero, pese a la tranquilidad que supone poder contar con el PP, Sánchez tuvo también palabras para Unidas Podemos. "A la izquierda a la izquierda del PSOE", dijo, "me gustaría que hubiera una reflexión para, después de lo que ha ocurrido en Ucrania, aumentemos nuestra capacidad de disuasión". "Ni Europa ni la OTAN es una organización hecha de veleidades expansionistas o imperialistas como es la Rusia de Putin". Y "hemos visto", añadió, como "dos democracias tan importantes como Suecia y Finlandia han roto cientos de años de neutralidad para incorporarse a la OTAN". "No aspiran a ampliar sus fronteras o atacar a otro país, sino defender su modo de vida".

Con estos argumentos el presidente pidió a Unidas Podemos que dé pasos para "garantizar nuestra seguridad y nuestra defensa, hoy amenazadas," y, para ello, insistió, "se debe aumentar nuestras capacidades de disuasión". Con la visita de Biden a Madrid, España y EEUU han puesto al día su relación estratégica con un nuevo documento que actualiza los compromisos adquiridos hace dos décadas y refuerza la colaboración entre los dos países en todas las materias, singularmente, en temas militares. 

Fuentes de Moncloa apuntaban ayer que llevan meses trabajando con EEUU en esta ampliación de la potencia militar americana en la base gaditana. En la comparecencia ante los medios de Biden y Sánchez, que se realizó sin preguntas, el presidente estadounidense indicó que este incremento "ayudará a la relación bilateral" con España y que espera que la aprobación se produzca "antes que después". España es un "aliado indispensable" dentro de la OTAN, remarcó.

18 puntos

La declaración conjunta de Estados Unidos y España recoge 18 puntos en los que ambas naciones aspiran a estrechar sus lazos, en un momento en que el mundo se ha dividido de nuevo en bloques. Los dos países se encuentran en el mismo lado para reforzar "las respuestas militares ante los desafíos transatlánticos y globales" y "defender la democracia, los derechos humanos y la igualdad de género". Pero también para "intensificar la colaboración en materia de seguridad y de justicia".

Esto significa más cooperación en la lucha contra el terrorismo, la ciberdelincuencia, el narcotráfico y la trata de personas. Otro de los acuerdos es la promoción de una "migración segura, ordenada y regular", con una enfoque "integral" de la gestión de los flujos migratorios irregulares que garantice un "trato justo y humano".

Según Moncloa, Biden se ha mostrado interesado durante el encuentro por los acuerdos de migración regular que España firma con otros países como Honduras y muchas naciones africanas. En este sentido el texto alude al fortalecimiento de las vías legales "con especial énfasis en América Latina y el Caribe", que es la inmigración que recibe EEUU, y a "la importancia de una cooperación permanente" por "los retos de la migración irregular" en la región del Norte de África, que es la que llega a España.

Menor dependencia de Moscú

En un momento en que Rusia ha puesto en jaque el suministro de energía de la UE, el comunicado conjunto de Sánchez y Biden incluye también una mención "acciones conjuntas" para "mejorar la seguridad energética de Europa y reducir la dependencia de los combustibles fósiles" de Moscú. Se apuesta por colaborar para "aumentar la diversificación geográfica de las fuentes de energía, especialmente el gas natural". EEUU es en estos momentos el principal proveedor de España de gas licuado, que llega en barcos y luego es regasificado en las plantas de nuestro país.

Sánchez y Biden se reunieron por espacio de una hora en la Moncloa. A las 16.12, doce minutos más tarde de la hora prevista, llegó el mandatario estadounidense a bordo de su blindado, la Bestia, y el jefe del Ejecutivo le recibió al pie de la escalera. Subieron los cinco peldaños, saludaron ante los gráficos y pasaron a su primer encuentro formal. Tras despachar juntos, comparecieron ante los medios hacia las cinco de la tarde. El presidente norteamericano estuvo acompañado por el secretario de Estado, Anthony Blinken; el jefe del Pentágono, Lloyd Austin, y el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan. Con el líder socialista, por su parte, estuvieron los ministros de Exteriores y Defensa, José Manuel Albares y Margarita Robles, quienes junto al Rey recibieron a Biden en la pista, en la base aérea de Torrejón de Ardoz (Madrid), una vez que hubo tocado tierra el Air Force One (a las 15.04, procedente de Alemania).