El Gobierno de coalición retoma el curso político con la misma exhibición de las diferencias entre los socios, a cuentas en este caso sobre la responsabilidad de la patronal en la consecución de un acuerdo para lograr una subida salarial general, que contribuya a contener la inflación. Mientras la parte socialista está instalada en un confortable llamamiento al entendimiento de los agentes sociales, la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, en pleno impulso del "movimiento ciudadano" con el que pretende concurrir a las elecciones generales, se ha puesto claramente del lado de los representantes de los sindicatos. 

La vicepresidenta segunda del Gobierno ha asegurado que "los sindicatos tienen razones para salir a la calle contra la patronal" después de que esta última se levantada de la mesa de negociación de convenios colectivos. A la par, la también ministra de Trabajo ha descartado que ella vaya a "apoyar ninguna manifestación" con su presencia, aunque considera que es un derecho que tienen los trabajadores para exigir subidas salariales, algo que ella considera que en la situación actual es necesario.

Después de que la semana pasada mostrara su "apoyo explícito a las movilizaciones sindicales frente a la patronal española", Díaz ha tratado de rebajar la contundencia de aquellas palabras sin llegar a desmarcarse del todo: "No voy a salir a manifestarme, pero creo que hay razones en los sindicatos para que se movilicen porque llevamos desde el 5 de mayo sin avanzar en una negociación". La vicepresidenta se refería a la mesa en la que los agentes sociales negociaban la subida salarial ante el incremento de la inflación.

"Yo he suscrito 14 grandes acuerdos sociales, podía haberlo hecho de parte y no lo he hecho, pero en esta ocasión la patronal española se levantó de una mesa diciendo que no quiere revalorizar los salarios", ha denunciado Díaz en una entrevista en la SER. Con esto ha reclamado al presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, que sea solidario con el país y busque un entendimiento con las centrales sindicales para poder elevar el salario de los trabajadores.

Respaldo a la patronal

Sin llegar a desautorizarla y, sobre todo, sin buscar el enfrentamiento directo, el PSOE y sus ministros se han ido desmarcando de su postura. La portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, en una entrevista con EL PERIÓDICO, diario integrante del grupo Prensea Ibérica al igual que este medio, ya intento quitar hierro a este conflicto interno y aseguró que "cada uno tiene una forma de expresarse, de matizar su posición". Pero el Gobierno, añadió, "no puede hacer otra cosa que un llamamiento a los agentes sociales". "Hacer confluir el interés legítimo de los trabajadores demandando un mejor salario y el interés económico de los empresarios en un interés común, que dé respuesta a la situación que vivimos", señaló. 

A diferencia de Díaz, la parte socialista, huye de cualquier reproche a la CEOE. Una postura que este lunes ha reforzado la ministra de Hacienda y vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, que ha dicho que confía "en el sentido común de la patronal, con su presidente al frente". Apoyo claro a Garamendi que ha llegado también del propio PSOE. Su portavoz, la ministra de Educación, Pilar Alegría, ha insistido en el respaldo a la negociación y el acuerdo entre los agentes sociales.

"Ellos, a diferencia de lo que ha hecho el principal partido de la oposición, han sabido estar al lado de gente, arrimando el hombro, cerrando filas con el Gobierno en estos meses tan complicados", ha apuntado sobre sindicatos y empresarios. Alegría ha subrayado la "responsabilidad" de ambos y dijo que mantendrán el "respeto a la buena labor de los agentes sociales", dejando así sola a Díaz en las críticas a la patronal. 

Elevar el SMI

Sobre el salario mínimo interprofesional, Díaz ha apuntado que este viernes reunirá a la comisión de expertos para encargarles una propuesta sobre la cantidad a la que se debería subir. El compromiso del Gobierno es que en 2023 alcance el 60% del salario medio español. La comisión de expertos debe ayudar a determinar cuál es el salario medio que debe servir de referencia. De acuerdo a los cálculos del año pasado, el SMI debería situarse en 1.049 euros al mes en 2023; este cálculo debe ser actualizado ahora. En todo caso, Díaz interpreta esos 1.049 euros como el "tope mínimo" ante la creciente inflación. La ministra ha recordado que el SMI se puede elevar sin necesidad de acuerdo con la patronal, como ya se hizo la última vez, ya que es una potestad del Gobierno.

Montero, por su parte, ha expresado que todo el Gobierno (socialistas y morados) comparten el objetivo electoral de llevar el SMI al 60% del SMI en 2023.

CEOE censura la actitud "poco constructiva" y "arrogante" de Díaz

La toma de partido de Yolanda Díaz a favor de las posiciones sindicales en la mesa de negociación, su apoyo a las movilizaciones y su señalamiento expreso al presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, como responsable de la ruptura del diálogo está provocando malestar en la organización patronal. Garamendi no ha salido al paso, al menos por ahora, de las declaracione de la minstra, pero sí lo han hecho dos vicepresidentes de la CEOE. Este lunes, el presidente de la organización de autónomos ATA y vicepresidente de CEOE, Lorenzo Amor, ha acusado a la vicepresidenta segunda del Gobierno de tener un discurso "muy poco constructivo": "En lugar de buscar el diálogo, el consenso y la paz social, vuelve a ponerse al frente de las movilizaciones un miembro del Gobierno. Lo ha dicho claramente, que apoya las movilizaciones contra los empresarios, contra la patronal. Es muy poco constructivo", ha dicho Amor en una entrevista en 'La Hora de La 1', recogida por Europa Press.

Amor acusa a Díaz de "tirar la piedra y esconder la mano" y le ha recordado que ella "tiene capacidad para aliviar la carga y la pérdida de poder adquisitivo que tienen los trabajadores", con una deflactación del IRPF o una bajada de las cotizaciones de los empleados. El presidente de ATA ha lamentado que la ministra de Trabajo "utilice el lenguaje" contra los empresarios y "demonizando a los autónomos", y ha añadido que resulta "muy fácil" hablar de subir los salarios de acuerdo a la inflación mientras que el Gobierno no adecúa los contratos públicos al IPC.

El viernes pasado fue el presidente de la Confederación Empresarial de la Comunidad Valenciana (CEV) y vicepresidente de la CEOE, Salvador Navarro, quien criticó la "arrogancia" de la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y censuró su "poca empatía hacia las empresas" de sus manifestaciones.

Aviso de movilizaciones

Desde UGT, el secretario general del sindicato en Cataluña, Camil Ros, ha instado a las empresas a retomar las negociaciones sobre un acuerdo salarial que cuente con el apoyo de todos los agentes implicados, y ha mantenido el aviso de movilizaciones masivas a partir de octubre si la patronal no deja de lado su "enrocamiento". "La subida de precios tiene un impacto más importante en las familias que en las empresas. No subir los salarios puede suponer un freno a la economía y al consumo, por lo que la mejor manera de combatir esta bajada de la actividad económica es que conseguir que el dinero llegue las familias", ha recalcado Ros.