Cursach y Sbert solicitan condenas de más de 30 años de prisión para el exjuez Manuel Penalva y exfiscal Miguel Ángel Subirán por su actuación durante la instrucción del caso. Recién absueltos por la Audiencia Provincial de Palma, el magnate y su número dos les atribuyen hasta 23 delitos de revelación de secretos, obstrucción a la justicia, omisión del deber de perseguir delitos, prevaricación, inducción al falso testimonio y coacciones. También figuran en el escrito de acusación, presentado en el Tribunal Superior de Justicia, los cuatro agentes del grupo de Blanqueo de la Policía imputados en esta causa, para quienes solicitan también elevadas condenas de prisión. El documento está presentado también en nombre de Jaime Lladó y Antonio Bergas, que fueron procesados en el caso Cursach pero exculpados el primer día del juicio.

El documento sostiene que entre 2014 y 2018, durante la investigación, los seis acusados "decidieron vulnerar los derechos fundamentales de las personas investigadas" tanto en el caso Cursach como en las pesquisas sobre la ORA y el IME. Afirma que Penalva, Subirán y los policías "obraban coordinadamente en unidad de actuación" y les atribuye la filtración a periodistas de decenas de informaciones que eran "secretas o reservadas para generar una opinión social desviada que vulneraba el derecho a la presunción de inocencia" de los investigados. Mientras, mantenían la causa bajo secreto "para evitar que las defensas tuvieran acceso a la información". El escrito enumera decenas de informaciones periodísticas publicadas durante la instrucción del caso.

El escrito, presentado ayer ante el TSJB, atribuye también a los seis acusados la detención "injustificada" del hermano y los padres de Álvaro Gijón en junio de 2017 para "presionar" al político y "generar un clima de terror" entre los investigados. También sostiene que durante la investigación del caso fueron encarceladas varias personas por no declarar en contra de Gijón y otros imputados en la investigación del caso ORA. También asegura que los policías de Blanqueo coaccionaron a Sbert para que implicara a José María Rodríguez en el caso, bajo la amenaza de ir a prisión, y que Penalva y Subirán manipularon las declaraciones de varios testigos durante la instrucción.