28-F DÍA DE ANDALUCÍA

Moreno explota el andalucismo contra el Gobierno de España en un acto pensado para la televisión

El cambio de Andalucía de la mano del PP llega también a su gran día: el show televisivo se come al solemne acto institucional de años atrás | La popular Eva González se consolida como presentadora de la gala y una protagonista más junto a un mediático plantel de estrellas galardonadas que se acompañan de otros perfiles más profesionales menos folklóricos

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, interviene durante el acto institucional.

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, interviene durante el acto institucional. / JOAQUÍN CORCHERO / EP

Isabel Morillo

El Día de Andalucía, 28 de febrero, fue durante años una gala excesivamente formal y acartonada donde el decreto que concede las medallas e hijos predilectos de la comunidad lo leía recitando el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) el viceconsejero de Presidencia de turno como si fuera un notario. Eso cambió cuando llegó el PP al Gobierno y en esta gala, la quinta organizada con los populares en el poder, se ha consolidado un estilo propio. Del tono solemne y serio al auténtico show televisivo sin institucionalidad. La conductora del acto, la presentador Eva González, que se dirige al presidente de la Junta como “presi”, contribuye a que en ocasiones uno crea más que está en el salón de su casa viendo el programa de ‘prime time’ de turno que en un evento institucional que siempre ha estado cargado de reivindicaciones políticas.

Pasar de un acto soso que aburría las ovejas a un show en el que el espectáculo engulle la solemnidad es un paso más en la construcción de esa ‘nueva Andalucía’ que reivindica el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla. El suyo, junto al que da el presidente del Parlamento andaluz a primera hora de la mañana en la Cámara autonómica, es el único tono institucional de una gala “más festiva, más alegre y más emocionante”, dijo al arrancar su intervención. Demasiado, avisan sus detractores, que lamentan que se haya frivolizado en exceso la celebración del 28 de Febrero.

Hubo mensajes políticos, aunque entre actuaciones musicales, hasta cinco además del himno final interpretado por el artista almeriense David Bisbal, reconocido junto a Lola Flores como Hijos Predilectos de Andalucía. El público bailó y cantó en el Teatro de la Maestranza como si fuera un concierto o una verbena y a la salida lo que más se oía era: “Qué bonito ha estado”. Cantó el coro de Julio Pardo, arrancado con música de carnaval la gala, recién fallecido y reconocido con una Medalla de Andalucía. Sonó el arpa flamenca de Ana Crismán, cantó el grupo ‘Siempre Así’ su versión de ‘A mi manera’, retrotrayendo al público a las horas de madrugada de una caseta de Feria o una boda en sus últimos compases. El rapero Jesús L.C. puso al público a seguir el compás de su ‘freestyle’ con unas pulseras de luces blanca y verdes que habían colocado en cada butaca. Los hijos del exconsejero de Educación, el entrenador de baloncesto Javier Imbroda, fallecido el pasado abril, presentaron su grupo sobre las tablas del teatro, ‘Javi y Pablo’ y por último Bisbal convirtió el himno andaluz en una pieza propia posible gracias a una prodigiosa voz. Rosario Flores honró a su madre y agradeció la distinción en el centenario de su nacimiento. La poderosa artista de Jerez se murió con la pena de no tener en vida este reconocimiento a la que sin duda es hoy una andaluza universal.

Entre tanto entretenimiento, retransmitido en directo por Canal Sur Televisión y con decenas de cámaras y de programas entrando en directo, Moreno dio sus mensajes políticos: “La Andalucía actual no acepta tutelas ni injerencias” o “No es justo que se ataque a nuestra autonomía mientras que a otros territorios siempre, siempre, siempre se le pone alfombra roja”. El andalucismo de Moreno se reivindica inclusivo, “de todos”, pero se levanta contra el Gobierno de Pedro Sánchez. Detrás el recurso al Tribunal Constitucional contra el impuesto a las grandes fortunas del Gobierno, que la Junta de Andalucía denuncia que se ha perpetrado invadiendo competencias y tras el anuncio de Moreno de la supresión del Impuesto de Patrimonio. También hubo carga contra la ley del sí es sí, que “está tardando demasiado tiempo en corregirse” dejando a las mujeres “desamparadas”.

Moreno ha encontrado el tono para reivindicar “una Andalucía líder” que ahora se ve "como una comunidad atractiva y fiable". Hubo un canto a los abuelos andaluces, el mensaje esperanzador de que “la mejor Andalucía está aún por escribir” y que esta es una comunidad que “se hace fuerte en los dogmas sino en la libertad”. Recuerdo a la guerra de Ucrania, a las víctimas del terremoto de Siria y Turquía, a la crisis energética y la escalada desorbitada de los precios. Todo cabe en un discurso dicho con arte y para el aplauso: “El que pueda, que empate con Andalucía”, pronunció Moreno con tanto énfasis como el “Viva Andalucía” de su cierre.

Sobre el escenario desfilaron todos los premiados y destacó la presentadora, Eva González, que es una protagonista más de la gala aunque no reciba Medalla. Junto a las hijos predilectos, las Medallas de Andalucía Manuel Clavero Arévalo fueron para Mercedes Moll de Miguel y Pilar Távora, dos mujeres con una avalada y reconocida trayectoria profesional. El resto de galardonados contó con artistas, empresarios, médicos o mujeres ganaderas y del sector pesquero. El periodista José María Segovio, la Universidad Pablo de Olavide, el pintor Juan Valdés, el carnavaleo Julio Pardo, la Fundación Unicaja, el Real Club Mediterráneo de Málaga, el colegio de Jaén Cándido Nogales, el grupo MAS y la empresaria quesera Silvia Peláez, el Instituto de Geofísica de Granada, el cirujano cardiovascular Ramiro Rivera, el responsable del Grupo Azvi Manuel Contreras, el torero Manuel Benítez ‘El Cordobés’, el grupo ‘Siempre Así’, María Ángeles Cayuela (armadora), María Sánchez (veterinaria y poeta) o la Unidad de Policía Adscrita a la Junta integraron la nómina de premiados.