El auge de la Gallina Extremeña Azul

En peligro de extinción, sí, pero también en pleno auge. Así se encuentra la Gallina Extremeña Azul, una raza que en 2017 inició la senda de su recuperación y expansión. Ese año entró a formar parte Catálogo Oficial de Razas de Ganado de España y en 2021 consiguió lucir el logotipo de Raza 100% Autóctona del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) para la carne, huevos y productos elaborados procedentes de esta raza. Ahora los criadores de esta gallina diferente a todas se afanan por divulgar sus excelencias. Entre sus proyectos para este año está congelar el semen de los gallos y garantizar su supervivencia y conservación. En el horizonte está la comercialización de su carne, de calidad superior.

La Asociación de Criadores de Gallina Extremeña Azul (Acgexa), que gestiona el uso de este logotipo, así como el libro genealógico y el programa de cría de esta raza, se reunió el pasado mes de enero en Almendralejo para hacer balance del año 2022. En total son más de 110 los socios inscritos. Predican con el ejemplo, pues su presencia en ferias como la Internacional Ganadera de Zafra o la Agroganadera de Trujillo, hizo posible el año pasado que se animaran a más de una treintena de criadores a engrosar las listas de la asociación. El recién elegido presidente de la asociación, Juan Luis Gala, explica que actualmente hay censadas 1.195 gallinas en el libro genealógico de la raza, aunque existen muchísimas más que no están inscritas y que podrían estarlo. 

La empresa Gescan se encarga de la llevanza del árbol genealógico de la Gallina Extremeña Azul, así como de realizar las calificaciones de los ejemplares para poder formar parte de él en el caso de ser un animal puro. Está especializada en la atención a razas autóctonas, a las que realiza servicios de gestión técnico-económica, de promoción y difusión, así como proyectos de digitalización de procesos y redacción de proyectos. Será la encargada de la recolección y conservación del material genético una vez se haya puesto en marcha el proyecto de congelación de esperma de los gallos extremeños azules.

Juan Luis Gala destaca que la raza inició su despegue tras la obtención del sello de Raza 100% Autóctona por parte del MAPA. «Nuestro objetivo es lograr con la colaboración de la Junta de Extremadura, que se nos abran nuevos mercados para la carne , ya que se trata de un producto de gran calidad y que podría comercializarse muy bien como capones», explica.

«La gallina extremeña azul es un animal semipesado. El gallo puede superar los 4 kilos, mientras que la gallina alcanza hasta los 3 kilos. Es muy bueno en su rendimiento cárnico. Eso sí, tarda más que las razas industriales en llegar a estar lista para su sacrificio. Su carne tiene mucho más sabor, solo comparable con la de caza. Es muy diferente a las demás razas españolas y a cualquier raza mediterránea, caracterizadas por ser más ligeras y tener las colas altas, abiertas en abanico. La extremeña azul es rechoncha, fuerte, con cola cerrada y acabada en forma de pincel. Se dice de ella que es la única gallina mediterránea con porte atlántico. Es muy importante conservar esta raza en peligro de extinción y no mezclarla con otras, haciendo un exhaustivo seguimiento en las explotaciones», concluye.

Doble aptitud

Aunque es de doble aptitud -cárnica y ponedora- la Gallina Extremeña Azul también es apreciada por sus cualidades morfológicas y participa en concursos como el Campeonato de España de Avicultura, con la concurrencia de siete criadores extremeños, celebrado el año pasado en Jerez de la Frontera. Los jueces calificadores de la raza han recorrido toda nuestra comunidad autónoma, así como Cataluña, Castilla-La Mancha o Andalucía valorando animales y tomando muestras de sangre para la filiación de los mismos. A lo largo del año la asociación de productores realiza distintas jornadas técnicas con la asistencia de expertos que han profundizado en temas relativos a su crianza y cuidados.

Al igual que sucede con otras razas animales, los socios han disfrutado de la posibilidad de adquirir a buen precio animales excedentes del Centro de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Extremadura (Cicytex). También han podido acceder a ejemplares del Centro de Selección y Reproducción Animal (Censyra). De cristalizar el proyecto de conservación de su material genético y la apertura de la comercialización de su carne, podríamos estar ante el resurgimiento de una raza rústica, singular, hermosa y extremeña al cien por cien.