El consejero de Economía e Infraestructuras de la Junta de Extremadura, José Luis Navarro, ha reconocido que en los presupuestos de la comunidad autónoma existen 40 millones de euros en inversiones que "no están disponibles" para su gasto, y que corresponden al "anticipo a cuenta del cobro de la deuda histórica" para 2016.

Estos 40 millones de euros no están disponibles porque el Gobierno de España, tras conocerse el déficit de la comunidad autónoma en 2015, exigió a la Junta de Extremadura "la no disponibilidad" de esta dotación económica, por lo que el Ejecutivo regional aplicó "el principio de cautela" para no gastar esa dotación.

De esta forma lo ha explicado el consejero de Economía e Infraestructuras, José Luis Navarro, en una comparecencia en el pleno de la Asamblea de Extremadura a petición del Grupo Parlamentario Popular para informar sobre los motivos y las consecuencias para la inversión que se van a derivar del acuerdo de no disponibilidad de 40 millones de euros.

El consejero ha manifestado que la Junta presupuestó en el primer borrador de las cuentas 40 millones de euros de ingresos a cuenta del protocolo con la Administración General del Estado, que iba a destinar una dotación de 120 millones de euros en inversiones realizables dividida en tres años.

Después de que el PP y Podemos votasen no a los presupuestos, la Junta comenzó con el segundo proyecto de presupuestos, donde se incluyó la dotación de 40 millones de euros como "anticipo a cuenta del cobro de la deuda histórica" para la anualidad 2016, aunque se introdujo un "principio de cautela".

José Luis Navarro ha señalado que esos 40 millones de euros "ya estaban condicionados", por lo que tras el acuerdo con el Gobierno de España para declarar esa dotación "no disponible" no se ha introducido "ninguna condición nueva", aunque ha añadido que la Junta de Extremadura no renuncia a esos ingresos.

Principio de prudencia

José Luis Navarro ha señalado que el gobierno de la Junta de Extremadura ha aplicado el "principio de prudencia" con los 40 millones de euros, ya que los responsables públicos tienen que presupuestar gastos cuando son "posibles" e ingresos "cuando son seguros".

Asimismo, el consejero ha señalado que el PP, en la confección de los presupuestos autonómicos de 2015, aplicó "la imprudencia y el electoralismo", ya que "además de subir los ingresos", rebajó la partida de gasto, por lo que las cuentas "no eran realizables".

En la misma línea, ha manifestado que los ingresos "inventados no se suelen materializar", y que si esta situación se hubiese dado en una empresa privada, al responsable lo ponen "de patitas en la calle".