Hace varios meses que padres de adolescentes de Cáceres ya alertaron de que sus hijos habían comenzado a invertir dinero en casas de apuestas que se habían abierto recientemente en esta ciudad. Tal y como contó este periódico, una madre explicaba que descubrió que su hijo de 14 años y el grupo de amigos tenían esta práctica entre sus aficiones. "Ven el dinero fácil. Uno de ellos ganó 500 euros y entonces piensan que las apuestas son siempre así", relataba. Para acceder a estos locales, se ponían de acuerdo con jóvenes mayores de edad que invierten el dinero por ellos a cambio de una cantidad acordada. Algunos de estos progenitores se dirigieron incluso a la comisaría para pedir asesoramiento al Servicio de Atención a la Familia.