Se usará en conflictos familiares como divorcios, custodias de hijos o régimen de visitas. Y persigue dos objetivos fundamentales: restar cargar a los juzgados y, sobre todo, «encontrar el mejor acuerdo sin tener que llegar a juicio». Son los puntos claves del protocolo que se firmó ayer entre la Consejería de Sanidad y Políticas Sociales de la Junta y el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx). Se trata de una experiencia piloto en los juzgados de primera instancia del partido judicial de Cáceres capital, de manera que éstos deriven a los servicios regionales de Mediación Familiar todos los casos susceptibles de llegar a acuerdos antes de juicio: así se ofrece a ambas partes la posilidad de un acuerdo extrajudicial.

Este pacto, rubricado por el consejero José María Vergeles y el presidente del TSJEx, Julio Márquez de Prado, pretende extenderse a otros partidos judiciales para que sean las propias familias, con la ayuda de profesionales del ámbito social y jurídico, las que resuelvan sus diferencias antes de recurrir al sistema judicial.

A través del protocolo, serán los propios jueces los que deriven a los servicios de Mediación Familiar los procesos civiles de Derecho de Familia que consideren oportunos. «El objetivo de este acuerdo es fomentar el diálogo entre las familias y llegar a la búsqueda de soluciones por parte de los propios implicados con la ayuda de profesionales que están acreditados», aseguró Vergeles.

De hecho, el servicio de Mediación Familiar de la dirección general de Familia del Gobierno extremeño cuenta con una docena de profesionales como psicólogos, pedagogos, educadores sociales, trabajadores sociales o abogados que ya prestan este servicio, pero ahora de lo que se trata es de que sean los jueces, cuando el asunto ya está en los tribunales, los que deriven a las familias a este servicio para agotar primero la vía del diálogo.

primera reunión obligatoria / El protocolo tiene una vigencia de un año como experiencia piloto y se establecerá una comisión de seguimiento para analizar los resultados. Como novedad, si el juez remite a la familia a la mediación es obligatoria la asistencia a una primera reunión en la que se valorará el caso concreto para empezar a trabajar.

El proceso de resolución no puede alargarse más de 60 días y, si no se llega finalmente a un acuerdo, el caso vuelve de nuevo a los juzgados, según explicó Vergeles, quien apuntó que también puede darse el caso de que haya acuerdos parciales que después se tendrán en cuenta en el fallo judicial.

«Se trata de facilitar a las familias esta vía extrajudicial -insistió el consejero-. Además, no tendrá costes económicos porque el servicio se asumirá con los recursos propios con los que actualmente cuenta la Junta de Extremadura. Este sistema extrajudicial acelerará el proceso de resolución si se consiguen consensos sin acudir a juicio».

No obstante, si la experiencia se extiende a otros partidos judiciales y aumenta el volumen de trabajo, se verá la posibilidad de ampliar plantilla en este servicio: «Se trata de dar una respuesta eficiente a los ciudadanos y poner en valor estos servicios que son necesarios para que las familias resuelvan sus propios problemas», subrayó Vergeles.

Por su parte, el presidente del TSJEx señaló que la apuesta por la mediación es un posicionamiento que han apoyado los presidentes de los altos tribunales de las comunidades autónomas en las dos últimas reuniones celebradas en Bilbao (2015) y Logroño (2016), pero al carecer de regulación procesal es necesario la firma de protocolos como el que se rubricó ayer con la Administración regional de Extremadura.

Márquez de Prado incidió en que se debería potenciar la mediación, no solo en el ámbito regional, sino en otros casos judiciales y abogó por incluir en los programas de formación a jueces y fiscales más información sobre estos servicios de mediación.

en badajoz, mala experiencia / No obstante deseó que este protocolo de Cáceres «tenga mejores resultados» que en la ciudad de Badajoz, donde se firmó un acuerdo similar con el Ayuntamiento para derivar los casos al servicio de Mediación Familiar municipal y, según los datos aportados, de los 75 que se vieron el año pasado no se obtuvo ningún resultado de acuerdo, por lo que no se pudo evitar el juicio. «Estoy seguro de que en Cáceres vamos a tener más suerte», recalcó.

Cabe recordar que este protocolo está implantado en otras comunidades autónomas como Cataluña, Valencia, Murcia, País Vasco o Navarra, entre otras, y en estas dos últimas «los resultados son muy positivos», resaltó.

SENSIBILIZACIÓN / No obstante, el presidente del TSJEx insistió igulamente en la necesidad de fomentar «la formación y la sensibilización entre los trabajadores de justicia para que la mediación intrajudicial funcione».

Asimismo, en relación a si esta medida restará carga a los juzgados, aseguró que si bien ese es uno de los beneficios, no es el objetivo fundamental: «El fin es encontrar el mejor acuerdo para las familias». Y añadió que la filosofía de este protocolo recién rubricado se basa en la posibilidad de contar con expertos externos a la justicia para que las familias dialoguen y lleguen a acuerdos sin tener que llegar a un juicio.