El PSOE ha asegurado que "todavía no hay nada absolutamente decidido" sobre la Central Nuclear de Almaraz (CNA), mientras que el PP cree que el Gobierno "desdice" a la Junta y ha acusado a los socialistas de no tener un plan alternativo para la comarca de Campo Arañuelo.

La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, reiteró ayer la voluntad del Gobierno de cerrar el parque nuclear español según vaya alcanzando el final de su vida útil.

Incidió en que el Gobierno se atiene a la voluntad de cumplir con lo establecido en el programa del PSOE, que es tomar como referencia los 40 años de la vida tecnológicamente útil desde el inicio de la explotación comercial de una central.

El diputado popular Luis Alfonso Hernández Carrón ha recalcado que este anuncio "desdice y niega" lo que dijo el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, a una pregunta del líder del PP, José Antonio Monago: que "el gobierno de Sánchez no había dicho que iba a cerrar la central".

Para Carrón, la ministra dio ayer "un paso más en el anuncio de la no renovación de licencia de la Central Nuclear de Almaraz (CNA) y, por tanto, su cierre en 2020" y ha aseverado que "la Junta es culpable en el cierre de la CNA".

En este sentido, ha afirmado que el Ejecutivo extremeño "se puso en contra de la construcción del ATI para hacer viable la CNA", cuya licencia le concedió el anterior Gobierno del PP y a la que "la Junta presentó alegaciones en contra".

Según el diputado popular, el siguiente paso que seguramente habrá es que "el Gobierno de Sánchez revoque esa licencia que se dio para construcción del ATI lo que significaría otro paso para el cierre".

Además, Luis Alfonso Hernández Carrón ha aseverado que "ni Vara ni Sánchez tienen un plan alternativo para la comarca del Campo Arañuelo", en la que muchas familias viven de lo que produce la central, de la cual "dependen miles de puestos de trabajo".

Ha manifestado que en su partido seguirán "apostando por la continuidad de la CNA" y le ha exigido a Vara qué explique cuál es su posicionamiento que, a su juicio, es a favor del cierre.

Por su parte, el portavoz socialista, Valentín García, ha recalcado que "para llegar a 40 años, hay tiempo suficiente para que el Gobierno de España elabore el plan para las comarcas españolas afectadas, incluida la extremeña".

En segundo lugar, ha incidido en que "el desmantelamiento de una central nuclear lleva muchos años", desde que se decide hasta que se cierra "pasan como mínimo diez años". "No es llegar una mañana, darle al interruptor y cerrar las puertas", ha recalcado.

Igualmente, ha defendido que en las declaraciones del Gobierno de España "no hay nada nuevo ni distinto" a lo que ya ha manifestado que, según García, es el diseño de un plan de transición energética, en torno al cual se tiene que lograr "un gran consenso en cómo se va a generar la energía en un futuro en el país".

Y dentro de este plan, ha dicho, "está abierto a estudiar todas las fuentes de generación de energía", pues "no ha dicho que se vayan a cerrar mañana las centrales ni en qué período".

Asimismo, ha destacado que dentro del plan de transición energética, las energías renovables tienen que ser base fundamental y "Extremadura está en primera línea de ser una potencia generadora de energías limpias ahora y en el futuro".