Llegó a España en el año 2004 por el litoral catalán, ha estado expandiéndose por España y podría haber llegado a Extremadura. Expertos de la Universidad de Extremadura (UEx) han localizado dos huevos compatibles con el mosquito tigre (la especie llamada Aedes albopictus) en los términos municipales de Monesterio y Badajoz. El hallazgo se produjo el pasado agosto gracias a un proyecto de investigación de la universidad, titulado ‘Vigilancia del mosquito tigre y análisis de la posible circulación del virus del Nilo occidental en Extremadura’, liderado por la profesora Eva María Frontera Carrión junto al veterinario experto en entomología Daniel Bravo Barriga y un equipo de científicos y profesionales relacionados con este ámbito.

El pasado abril, dentro de este proyecto, se colocaron 61 trampas en 17 puntos de la región donde se está llevando a cabo la vigilancia. De esas 61 trampas, dos dieron positivo en agosto. «Se detectaron huevos compatibles con mosquito tigre, que al ser eclosionados y criados en el insectario de la Facultad de Veterinaria, han evolucionado hasta adultos de mosquito tigre», explican desde la universidad.

Los expertos señalan la facilidad que tiene este insecto para viajar en los vehículos, siendo este uno de los mecanismos más importantes por los que se ha ido extendiendo pasivamente por el país. Por este motivo, los puntos de vigilancia en la región se sitúan en las estaciones de autobuses, el aeropuerto, en las principales estaciones de servicio de la A5 y la A66, centros de neumáticos y centros logísticos de transporte de mercancías. «De igual modo, y debido a la facilidad de cría en el agua de los floreros, también hay trampas en los cementerios de Cáceres, Badajoz, Mérida y Plasencia», señalan.

UNA APP: MOSQUITO ALERT / De todas formas, con el fin de aumentar los puntos de vigilancia, la universidad pide a los ciudadanos que crean ver algún ejemplar de mosquito tigre, que lo fotografíen y lo envíen a través de la app gratuita de móvil Mosquito Alert, donde un grupo de expertos a nivel nacional podrá corroborar si se trata de un ejemplar de mosquito tigre u otra especie. Este insecto es fácilmente reconocible porque su cuerpo es negro y tiene rayas blancas en la cabeza, el tórax, las patas y el abdomen.

Pese a la presencia de esas dos trampas positivas, los investigadores de la UEx señalan que actualmente no hay motivo de alarma, ya que la cantidad de insectos es muy baja y las autoridades sanitarias ya han tomado las medidas oportunas para su eliminación. En esta misma línea, también se pronunció ayer el consejero de Sanidad, José María Vergeles, quien envió un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía. «Estamos actuando como tenemos que actuar, de forma preventiva, para que no generen problemas de salud pública, al igual que se hace con la fiebre del nilo, la avispa asiática o cierto tipo de garrapatas», señaló Vergeles. El consejero insistió en que no se ha detectado la presencia del mosquito tigre adulto, sino huevos de este insecto, el cual «no es peligroso en sí para la salud humana». «Es verdad que sus picaduras son más virulentas que las de otros mosquitos, pero en los casos autóctonos no se han detectado ninguna enfermedad provocada por una picadura del mosquito tigre», remarcó. Ese es el principal riesgo de este insecto, que es un importante transmisor de enfermedades tropicales como el dengue o el zika.

No obstante, según Vergeles existe un exceso de alarmismo cuando se habla de especies invasoras, de ahí que insistiera ayer en trasladar un mensaje de «calma a la población». El consejero explicó que cuando se conoció la presencia de estos huevos se puso en conocimiento de los alcaldes de Badajoz y Monesterio. En la primera localidad ya se han realizado labores de erradicación y «en breve fechas se acometerán también en Monesterio».