El exgerente de Feval, Juan Francisco Cerrato, ingresó en el centro penitenciario de Badajoz el pasado martes, después de que la Audiencia Provincial de Badajoz desestimara el recurso presentado por su abogado para eludir la cárcel por un delito continuado de malversación de caudales públicos. El argumento esgrimido por el letrado fue que su defendido padecía una enfermedad, pero la sección 3ª de la Audiencia Provincial, con sede en Mérida, no lo atendió en dos ocasiones. Por eso, el pasado 21 de enero ordenó el ingreso en prisión de su defendido que se ha producido el día 29.

Juan Francisco Cerrato ingresó en prisión de forma voluntaria a las 8 de la mañana, aseguraron esta mañana a El Periódico Extremadura fuentes penitenciarias. En el centro lo habitual es que los nuevos internos permanezcan en el Departamento de Ingresos al menos 1 día, pero en este caso el reo permanece todavía en este emplazamiento a la espera de que se le asigne un módulo definitivo. La Audiencia Provincial no ha atendido a la reclamación del abogado de Cerrato al atender que la enfermedad del defendido solo requiere de tratamiento farmacológico y revisiones periódicas de su médico. Asimismo, no ha considerado la suspensión de la pena a pesar de que el condenado tiene solicitado el indulto por cuanto que la acusación es por corrupción.