La difícil situación de precios a la baja que atraviesa el cereal ha contribuido al crecimiento de los cultivos destinados al almendro en prácticamente todas las zonas de la región. Según explica el presidente de la organización agraria Coag, Juan Moreno, los bajos precios en el cereal están haciendo que muchos agricultores se decanten por cultivos alternativos más rentables, como plantaciones de olivos o de almendros.

En este último caso, la proliferación de almendros ya es patente y evidente incluso en las comarcas del sur de la provincia de Badajoz, con una tierra «muy apta» para esta plantación. Según ha expresado Moreno «la prueba es que en muchos lugares se realizan plantaciones de almendro y de olivar en espacios que habitualmente se destinaban al cereal». No en vano, y aunque las perspectivas apuntaban este 2019 a un mantenimiento de las hectáreas destinadas al cereal en relación al pasado año, la superficie en Extremadura descenderá finalmente en torno a un cinco por ciento.

Una circunstancia que Moreno ha achacado a la tendencia continua de precios a la baja en el cereal, con lo que cada vez disminuye más la rentabilidad de los agricultores. «El otoño y el invierno se han comportado en condiciones óptimas como para achacar a la climatología este descenso en el número de hectáreas destinadas al cereal», dice. ,

El sector pasa, de este modo, por «dificultades» pese a la buena producción del pasado año y a las condiciones climatológicas aceptables.