El plan regional de vivienda 2018-2021 arranca con muy buena acogida. Las ayudas para realizar obras de eficiencia energética han agotado el presupuesto disponible para todo un año en solo tres meses, lo que ha obligado a la Junta a cerrar de forma anticipada la convocatoria que lanzó el pasado mes de abril con una dotación de 15,8 millones de euros. Según los datos que facilitó ayer la Consejería de Movilidad, Transporte y Vivienda, se han recibido un total de 2.498 peticiones para estas subvenciones, frente a las 1.114 que se preveía cubrir con el crédito inicial disponible.

La mejora de la envolvente térmica de las viviendas; la instalación de sistemas eficientes de calefacción y aire acondicionado; la colocación de paneles solares u otros equipos que permitan el uso de energías renovables para la producción de agua caliente; las obras para mejorar la protección contra el ruido o la instalación de sistemas de domótica son algunas de las actuaciones que se financian con cargo a estas ayudas. Su objetivo es disminuir el consumo energético global del hogar y pueden alcanzar hasta los 15.000 euros.

El Diario Oficial de Extremadura (DOE) publicó ayer las resoluciones en las que se informa del cierre de la convocatoria, justificado en que «la estimación de las solicitudes de subvención hasta ahora presentadas conllevaría el agotamiento del crédito vinculado». El plazo para pedir estas ayudas se abrió el pasado mes de abril y debería haber estado vigente hasta el mismo mes de 2020, pero en ese caso la Junta tendría que haber hecho frente a una modificación de crédito para aumentar los fondos disponibles y atender a todas las peticiones. Una situación que ya ocurrió en el 2017, cuando fue necesario ampliar con un millón más las ayudas para las obras de rehabilitación de viviendas.

Cabe destacar que el fomento de las obras para el ahorro energético es una de las principales patas del plan regional de vivienda 2018-2021, y a ella se destinan el 45% de los fondos: 16,7 millones de un total de 36,4. De hecho, han sido las primeras que se han puesto en marcha junto a las de conversión de locales comerciales en viviendas adaptadas para personas con discapacidad (novedad de este plan) y la construcción de casas autopromovidas. En la convocatoria aprobada en abril, el Consejo de Gobierno liberó 15,8 de los 16,7 millones disponibles. De estos se reservaron cuatro para este año, ocho para el 2020 y tres para el 2021. Para volver a solicitarlas, habrá que esperar a una nueva convocatoria.

más agilidad / La Consejería de Movilidad, Transporte y Vivienda quiso destacar ayer la «buena acogida» que ha tenido este programa por parte de los extremeños. «El beneficio que reporta a la ciudadanía queda acreditado al detectar que, en solo tres meses, el número de solicitudes ha aumentado en casi 500 con respecto a la convocatoria anterior», señalan desde el departamento que dirige Leire Iglesias.

El Ejecutivo apunta además que el cierre anticipado de la convocatoria facilitará la agilización de los trámites de resolución. Cabe recordar que las ayudas para realizar obras de eficiencia energética se crearon en Extremadura con una modificación del Plan de Rehabilitación y Vivienda 2013-2016. Financiadas en un 80% por los fondos Feder de la Unión Europea, su objetivo es impulsar actuaciones que mejoren el ahorro energético en las viviendas ya construidas.

Con ello, subraya la consejería, se busca disminuir el número de hogares y consumidores vulnerables de sufrir pobreza energética. También disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero «en un contexto de crecimiento económico sostenible», así como incrementar la calidad de la edificación, mejorar la salud de los propietarios, aumentar el confort de los usuarios y adaptar el parque de viviendas a los nuevos códigos de edificación.

Con fecha 6 de junio de 2016 se publicó la primera convocatoria con un crédito inicial de 3,2 millones de euros, aunque finalmente superó los 20. En este caso, se recibieron un total de 2.013 solicitudes y se benefició a 2.606 familias extremeñas.