De acuerdo a la tradición la finalidad es «purificar» a las mujeres. La realidad se traduce en unas consecuencias brutales, entre ellas los extremos de muertes por hemorragias y contagio del VIH.

Es el fruto de la mutilación genital femenina. Una arraigada costumbre que desde el Movimiento Extremeño por la Paz, en estrecha colaboración con comunidades y personalidades de la sociedad civil maliense, están intentando desterrar. Un corto documental narrará el camino de uno de los proyectos principales: ‘STOP Ablación’.

«Teníamos bastante material sobre la campaña que queríamos que viera la luz. Es como una herramienta de justificación que muestra el proceso y la campaña para acabar con la mutilación genital femenina», explica Sylvia Martín, una joven natural de Segura del Toro que está a las riendas de este proyecto.

Martín detalla que en el proyecto hay unas 4-5 personas involucradas y la previsión es que se estrene a finales de este año, coincidiendo con el fin de esta campaña.

«En Mali estamos llevando a cabo distintas actividades en pueblos: proyectamos películas, impartimos seminarios, hay talleres de teatro», dice Martín.

Todas estas iniciativas están dirigidas a crear conciencia y cambiar la percepción que se tiene sobre este ritual, que poco a poco se va desterrando de las comunidades: «Muchas veces tenemos la visión occidental de que allí nadie lucha y eso no es así. Nuestra organización es una mera herramienta. Colaboramos con asociaciones de allí, asesorándonos con la gente de allí y con cooperativas de mujeres de allí. No vamos a venir nosotros a dar la formación. Desde la organización apostamos porque sean las mujeres malienses las que formen», aclara Martín.

El Movimiento Extremeño por la Paz colabora con diferentes organizaciones del país como Healthy Tomorrow o Sini Sanuman, además de reconocidos artistas malienses como Tiken Jah Fakoly, Fatoumata Coulibaly o Sarafina Kone.

Mali es un país muy diverso y diferenciado entres sus comunidades. Así, mientras que la ablación es habitual en el sur del país, en el norte apenas se dan casos. Por eso el Movimiento Extremeño por la Paz aplica diferentes enfoques según la población a la que se dirige: «Este no es un tema sólo de mujeres, afecta a toda la comunidad. El mensaje está centrado sobre todo en las consecuencias que esta práctica tiene sobre la salud de la mujer. La erradicación va a nacer de la propia concienciación de la comunidad», explica Martín.

La meta, romper tabúes para ganar en salud de la mujer

La meta, romper tabúes para ganar en salud de la mujerEl proyecto ‘STOP Ablación’ está financiado por la Agencia Extremeña de Cooperación, las Diputaciones de Cáceres y Badajoz y el Ayuntamiento de Vivares.