Querían atraer la atención del presidente de la Junta de Extremadura, pero la plantilla de Tenorio se encontró con que Guillermo Fernández Vara no estaba ayer por la mañana en su residencia oficial en Mérida sino en Madrid, y por tanto su intención de trasladar al máximo responsable del gobierno autonómico sus reivindicaciones se debería quedar en eso, en intención. La plantilla de Tenorio cerró con la concentración de Mérida, con más de un centenar de personas (unas doscientas según los sindicatos), las tres jornadas de paro convocadas para exigir a los responsables de la empresa que cumplan con el convenio colectivo y con los pliegos por los que se LES adjudicó el transporte sanitario.

Más allá de los actos de protesta, los paros convocado los días 7, 14 y 21 de octubre (de 15.00 a 17.00 horas) han tenido una incidencia escasa porque la Junta fijó unos servicios mínimos de casi el 100%, que obligaban a cumplir no solo con las emergencias, sino también con los desplazamientos programados para tratamientos de diálisis o de quimioterapia y también para las altas y las rehabilitaciones. «Entendemos que las urgencias y emergencias hay que atenderlas y servicios como diálisis también, pero que se incluyan las altas y las rehabilitaciones ha aplastado nuestro derecho de huelga», señala Víctor Arnelas, uno de los integrantes del comité de huelga y representante de USO, que apoya la demanda interpuesta por UGT que se verá esta semana en la sede del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx). Confían en que la justicia declare nulos estos servicios mínimos. «Va a determinar cómo enfocamos la huelga del día 1, porque si no podemos afectar al servicio de ningún modo, no tenemos ninguna herramienta de presión», dice Arnelas.

falta de negociación/ Según los servicios jurídicos de UGT, el origen de la demanda ha sido «la falta de negociación de los servicios mínimos» y la aplicación de unos servicios mínimos «excesivos» que «anulan el derecho de huelga». La demanda es contra ambulancias Tenorio, aunque el SES está citado como responsable del servicio en la vista que se ha fijado para este jueves. Antes habrá un acto de conciliación aunque, a priori, parece poco probable que se alcance un acuerdo ahí.

Desde que se convocaran las acciones de protesta se han mantenido encuentros entre la empresa y la plantilla, aunque no se ha producido ningún acercamiento en las posturas y el planteamiento de los trabajadores es que habrá huelga dese el 1 de noviembre y que «buscarán la forma de hacerla efectiva».

«Concluimos los paros satisfechos a pesar de las trabas que hemos tenido», valoraron desde CSIF. El sindicato apoya también la demanda por los servicios mínimos y además ha puesto una denuncia en la Inspección de Trabajo por los vetos a las inspecciones de las ambulancias.

Este diario contactó con Ambulancias Tenorio, que no se pronunció sobre le paro de ayer.