Un reparto «razonable» para una oferta que no es la deseada. La Consejería de Educación acordó ayer con los sindicatos representados en la mesa sectorial la distribución de las 480 plazas para profesores de Secundaria y Formación Profesional (FP) que la Junta de Extremadura convocará en el año 2020. La oferta abarcará un total de 33 especialidades de las más de cien que podrían convocarse, siendo las más cuantiosas las destinadas a profesores de Inglés (un total de 47 plazas), Física y Química (45), Geografía e Historia (44), Lengua Castellana y Literatura (42) y Matemáticas (41). Para el resto, apenas se supera la veintena de plazas.

De las 480 vacantes, 354 se reservan para Secundaria, 113 para FP, 11 para las escuelas de idiomas y dos para conservatorios. Un total de 52 irán destinadas a personas con discapacidad. Además, a estas 480 hay que sumar otras 13 plazas de promoción interna que se reparten entre el cuerpo de profesores de Enseñanza Secundaria con seis plazas para Orientación Educativa, dos para Educación Física, una plaza para Intervención Sociocomunitaria, dos plazas para Inglés, una plaza más para Geografía e Historia y la última para Lengua.

Al término de la reunión, la consejera de Educación y Empleo, Esther Gutiérrez, se mostró satisfecha con el resultado, si bien al hilo de las críticas de los sindicatos reconoció que le hubiera gustado poder convocar más plazas. No obstante, señaló que la de 2020 será «una de las mejores convocatorias desde el 2008» y apuntó que la región está cumpliendo lo acordado en el calendario de oposiciones negociado con los sindicatos, de forma que en 2021 se celebrarán oposiciones para Educación Primaria.

El objetivo de esta convocatoria, recordó Gutiérrez, es mejorar la estabilidad de las plantillas docentes y bajar la tasa de interinidad, que pasará del 20,7% actual hasta el 14,7%, seis puntos menos. La idea es que al final de la legislatura la tasa de interidad baje al 8%, es decir, la mitad de la media actual del 15,7% entre Secundaria y Primaria. La consejera ha venido defendiendo que convocatorias como la que se lanzará el próximo año con 480 plazas para las enseñanzas medias ayudarán a conseguirlo, pero lo cierto es que los sindicatos del sector educativo lo ponen en duda.

REPARTO «RAZONABLE» / Ya el pasado 29 de noviembre, cuando se anunció la oferta, consideraron la cifra «triste y decepcionante» y tras la mesa sectorial de ayer insistieron en la misma idea. «Lo bueno es que se despejan certezas, aunque la cifra no sea la deseada», explicó ayer la responsable de Educación del sindicato CSIF, Mercedes Barrado.

Según detalló, la mesa se alargó durante varias horas porque para llevar a cabo el reparto, la consejería y los sindicatos tuvieron que estudiar numerosas variables relacionadas con las jubilaciones, vacantes, etc. para hacer el reparto por especialidades. Desde CSIF se defendía sacar el mayor número posible de especialidades y Barrado se mostró satisfecha, pues consideró «razonable» un reparto de 480 plazas en 33 categorías. No obstante, recuerda, en la última convocatoria se sacaron 65 para más de 1.200 plazas. Así, pese que inicialmente las posturas permanecían alejadas en cuanto a la oferta de plazas (los sindicatos no esperaban en ningún caso que se convocaran menos de 544), en cuanto al reparto de las especialidades sí se alcanzó un acuerdo.

Cabe recordar que del total de plazas convocadas para docentes de enseñanzas medias, 351 corresponden a la tasa de reposición (la cobertura de los puestos de los profesores que se jubilan o fallecen); 103 son las vacantes que no se cubrieron en la convocatoria de 2018; 17 corresponden al 5% adicional del marco de estabilidad presupuesaria y otras nueve a la tasa de estabilidad, «que se han cogido para redondear» a esas 480, dijo Gutiérrez. De esta forma, la consejería aún mantiene 64 vacantes de la tasa de estabilidad.