Llega la última tecnología quirúrgica a Extremadura. Es el robot Da Vinci, un equipo robótico con varios brazos articulados que permite cirugías menos invasivas, más precisas, con menos complicaciones y tiempo de recuperación del paciente. Son algunas de las ventajas que, de momento, ha demostrado este equipamiento en los 60 hospitales del país en los que ya está instalado.

De hecho, solo hay cinco comunidades españolas que no cuentan en su sistema sanitario con este equipo robótico y entre ellas está Extremadura. Tampoco tienen ninguno en Murcia, La Rioja, Aragón y Castilla-La Mancha. Pero la comunidad extremeña quiere abandonar pronto ese grupo y ya prepara la adquisición del primer equipo robótico que tendrá el SES.

Lo confirma a este diario el director general de Asistencia Sanitaria del SES, Vicente Alonso, tras ser preguntado. La idea, explica el dirigente sanitario, es que el primer robot llegue a Extremadura a mediados de este año. «El objetivo es que a final del 2020 esté operando con normalidad en el SES», destaca Vicente Alonso.

Para que este propósito sea una realidad, la Consejería de Sanidad y Políticas Sociales está en estos momentos redactando los pliegos del concurso público para sacar a licitación la adquisición de un primer robot. «Se está valorando ahora mismo si se puede hacer ese concurso por exclusividad, ya que en el mercado actualmente solo está disponible el robot Da Vinci. Hay otros modelos que están en fase de investigación, pero todavía no están disponibles», prosigue.

La adquisición se lleva a cabo a gracias a un convenio del SES y las dos diputaciones provinciales para implantar la cirugía robótica tanto en Cáceres como en Badajoz. Y la licitación que ya se está preparando para comprar el primer robot está destinada al complejo hospitalario de Badajoz. «A continuación, a final de este año o en el primer semestre de 2021, haremos un segundo concurso para adquirir otro robot para el nuevo hospital de Cáceres».

El objetivo es que esa primera licitación se resuelva antes de mitad de este año y que el robot pueda estar totalmente operativo en el complejo hospitalario de Badajoz a finales de 2020. Su puesta en marcha también requiere de una formación, que se contempla en el contrato de compra. «Cuando se realiza una adquisición se incluye un acuerdo de aprendizaje. El propio equipo cuenta con varias consolas y una de ellas es un simulador para la formación. Luego, cuando se instala en el hospital la empresa se encarga de impartir la formación a los profesionales y también existe una formación en los centros en los que ya está funcionando con normalidad», explica el director general de Asistencia Sanitaria.

Alonso reconoce que son equipos muy costosos: la primera licitación se hará por un millón de euros. Pero no solo es cara su adquisición, sino también el mantenimiento «porque requiere de una línea directa con la empresa y también el material que utiliza es más costoso que el que se emplea en una cirugía laparoscópica convencional». Aún así, defiende que este es «el futuro de la cirugía». «Se ha comprobado que la robótica mejora la seguridad y efectividad de los procesos, tiene menos complicaciones, reduce los días de ingresos de los pacientes intervenidos porque se trata de una cirugía menos invasiva y todo eso también puede ahorrar costes en la hospitalización».

De momento, el equipo Da Vinci se está utilizando sobre todo en el tratamiento del cáncer de próstata y de otras afecciones urológicas, pero también se usa para intervenciones de ginecología, cirugía general, cirugía oral y maxilofacial, cirugía torácica o cirugía cardíaca.