La construcción del matadero de cerdo ibérico en la región ha estado en el alambre. Los promotores van a continuar con el proyecto, que está a punto de empezar a ejecutarse, pero la crisis en el sector por el desplome del consumo a causa de la pandemia del coronavirus, ha llegado a sembrar dudas sobre la posibilidad de mantener el proyecto en pie en estos momentos. De hecho, esta semana se ha producido una reunión entre los siete empresarios que promueven esta instalación en Zafra, precisamente para tomar una decisión al respecto. Al final las siete empresas que lideran el proyecto han decidido de forma unánime, seguir adelante, y mantener la financiación para levantar la infraestructura, según confirma Enrique Espárrago, presidente de Señorío de Montanera y del consejo de administración de Cibex. El conglomerado de empresas que impulsan el proyecto lo completan Ibercom, Estirpe Negra, Industrias Cárnicas Villar, Montesano, Grupo Alejandro Miguel y Campofrío.
El proyecto ha salvado ya el 99% de los trámites y tiene incluso la licencia de obras ya solicitada en el consistorio de Zafra, según afirman los empresarios. Estaban a la espera de salvar unos flecos menores en uno de los trámites, pero todo estaba listo para que los trabajos hubieran comenzado entre marzo y abril. Sin embargo la pandemia del coronavirus, el estado de alarma y la crisis que ha generado en el sector el parón en la hostelería (el principal canal de distribución) ha obligado a las empresas que promueven este proyecto, que acumula varios retrasos, a echar cuentas de nuevo.
Desplome
Las ventas a nivel nacional se han desplomado por encima del 70% en el caso de los productos más destacados, como son el jamón y la paleta. La situación la han salvado mejor en el caso de las exportaciones de carne y en menor medida los embutidos, con una caída también próxima a la mitad de la facturación prevista en esas fechas.
Los mercados internacionales son los que han permitido amortiguar parte del golpe a nivel nacional, que se teme además que no se recupere fácilmente por el retraso de Madrid y Barcelona en la desescalada (dos mercados claves por el consumo de estos productos entre el turismo) y por la paralización que se prevé en el turismo en general.
La idea, a pesar de todo ello, es poder iniciar este mes los primeros trabajos, en los que se prevé una inversión de entre 16 y 18 millones, y que los sacrificios se puedan iniciar allí dentro de dos campañas.
