Las autoescuelas de la región quieren que se les permita ampliar el aforo en sus establecimientos tal y como han hecho ya otras regiones que están, como Extremadura, en fase 3. Los tres colectivos que reprendan al sector en la región han remitido un escrito a la Junta de Extremadura en el que plantean que se les autorice a ampliar hasta un 50% de su aforo la capacidad para atender a los alumnos y hasta el 75% en el caso de que se imponga la utilización de guantes y mascarillas, según plantean en el escrito que remitieron el pasado viernes. Las autoescuelas no tienen en estos momentos una limitación de aforo como tal sino la imposición de dejar dos meros de distancia en la distribución de los puestos que ocupan los alumnos en el caso de las clases teóricas y hasta un tercio de su aforo.

La medida, según señalan los responsables de estos colectivos, deja reducida al mínimo la capacidad máxima de sus locales y dificulta poder llevar a cabo una tarea que tiene el grueso de su actividad en los meses de verano, cuando los estudiantes terminan las clases y aprovechan la época estival para preparar los exámenes que permiten obtener el carné de conducir. «En esta época tenemos el 75% de los alumnos que recibimos a lo largo del año», recuerda Francisco García, responsable de la asociación de autoescuelas en la provincia de Cáceres.

Decepción

En el sector no ocultan su decepción por el hecho de que no se haya planteado ningún cambio en la situación de las autoescuelas a pesar de que ya cuando retomaron la actividad, el día 25 de mayo, criticaron que las limitaciones en el interior de sus establecimientos dificultaban la labor docente. Critican además que la situación sí se ha ido relajando para las actividades en el interior de otro tipo de establecimientos.

La Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE) planteó el pasado 8 de junio que se ampliarán los aforos en todos los territorios que llegaran a fase 3. «Ya se ha hecho en otras comunidades como Cantabria y aquí hemos tenido tiempo incluso de hablar de la vuelta de las corridas de toros con aforos limitados y no se ha revisado nuestra situación», lamenta. En el caso de Cantabria, un decreto autoriza a que se amplíe el aforo hasta el 50% o 75% si se puede garantizar la distancia de 2 metros.

Junto a eso, después de que se traspasaran las decisiones sobre el avance en la desescalada a las comunidades autónomas que alcanzaran la fase 3, se publicó en el BOE una nueva orden que limita a 1,5 metros la distancia de seguridad entre personas. Pero es la Junta ya quien toma las decisiones con lo que no pueden ponerla en práctica hasta que el gobierno regional determine si asume esa propuesta o no.

La reivindicación se limita a las actividades en el interior del aula.

En el caso del coche, donde se realizan las clases prácticas, la indicación que se ha dado es que las clases prácticas sean individuales, puesto que en el interior de los vehículos es imposible mantener la distancia de seguridad. Además se deben utilizar guantes y mascarillas (porque el profesor puede necesitar acceder a los mandos del coche si tiene que corregir al alumno) y tras cada clase el coche tiene que ser desinfectado. «Va a ser un verano complicado y con muchas limitaciones», lamentan en el sector.