El Consejo de Gobierno de la Junta ha decretado el cierre de la hostelería a las seis de la tarde los días 24 y 31 para evitar "sobremesas largas" y aglomeraciones ante el temor que ya han expresado numerosos alcaldes por la costumbre de salir a la cañas de Nochebuena y Nochevieja. No obstante, los locales que lo deseen podrán volver a abrir a las ocho para atender los servicios de cenas que tengan pendientes, según ha explicado el consejero de Sanidad, José María Vergeles.

La decisión se ha tomado este martes en una nueva reunión extraordinaria del Consejo de Gobierno, ante la evolución "preocupante" de la pandemia en Extremadura. La incidencia del virus a 14 días se sitúa en 280,13 casos por cada cien mil habitantes, la tercera más alta del país solo por detrás de Baleares y Madrid, según los datos del Ministerio de Sanidad. Por el momento, las reuniones hasta un máximo de 10 personas en los domicilios se mantienen, así como el toque de queda hasta las 00.30 en Nochebuena y Nochevieja. La medida se hará efectiva este mismo martes, tras su publicación en el Diario Oficial de Extremadura (DOE).

Vergeles ha explicado que con esta "ruptura" la Junta busca frenar comportamientos irresponsables y también proteger a los propios hosteleros, para que no se tengan que convertir en "vigilantes" de sus propios negocios. Ha reconocido que aglomeraciones pueden darse también a las cuatro de la tarde, pero se ha optado por cerrar a las seis para facilitar que el sector pueda ofrecer también el servicio de comidas. En este sentido, el consejero ha recordado que la Junta "ha velado siempre por el cumplimiento de tres objetivos: la salud, el desarrollo social y el desarrollo económico". A su juicio, esta nueva medida demuestra que el Ejecutivo vela por combinar estos derechos y que "no le tiembla el pulso cuando tiene que tomar determinadas decisiones".

"La hostelería vuelve a pagar"

Desde la Confederación Empresarial Extremeña (Creex), han lamentado que la hostelería "vuelva a pagar la irresponsabilidad de unos pocos", al sufrir especialmente las nuevas restricciones en Extremadura ante el aumento de contagios por coronavirus. En una nota, la patronal extremeña ha mostrado su pesar ante el hecho de que “aún con el cumplimiento con rigor y profesionalidad” de todas las medidas sanitarias marcadas, la hostelería sea la gran perjudicada, pues al cierre de los bares a las seis en Nochebuena y Nochevieja hay que sumar la suspensión de la ampliación del toque de queda el pasado fin de semana y la reducción de las personas por mesa de 10 a 6.

El secretario general de la Creex, Javier Peinado ha lamentado que “se vuelva a colocar al empresario en el centro del huracán y que se demonice la actividad de los locales de ocio, como si fuesen responsables de la propagación de contagios, cuando la realidad mostrada por Sanidad es que no es así". "El problema no está en los locales, sino en comportamientos irresponsables en el ocio no controlado", ha señalado.

Según la Creex, de las casi mil inspecciones realizadas para determinar si se cumplen las medidas, solo se han producido 60 actas de infracción, y “casi ninguna por incumplimiento de medidas, sino por cuestiones como diferencias de matiz en cuanto a horarios o similares”. La organización ha lamentado asimismo que el Gobierno central no atienda las medidas de ayudas directas planteadas por las empresas, como por ejemplo se han efectuado ya en Alemania, Francia e Italia.