No es un territorio acotado pero las especies y lo flujos que hay otorgan un espacio común para la actividad cinegética que quieren reivindicar cinco federaciones de caza que se han unido para promocionar el Corredor Cinegético del Sudoeste Ibérico. Lo impulsan las federaciones de caza de Extremadura, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Andalucía occidental y la región portuguesa del Alentejo, que acaban de presentar juntos ese proyecto que se integrará a los más de 70 de distintos ámbitos (naturaleza, cultura y patrimonio, agua, industria, agua, deportes o religión) que integran ya esta iniciativa social. 

En el caso del corredor cinegético, aglutina a algunos de los espacios más emblemáticos para estas especies, como la sierra de San Pedro, la sierra Suroeste, Monfragüe, Gredos, Villuercas, Hornachos, cornalvo o Andújar y algunas de las especies más representativas para los cazadores; entre ellas la perdiz roja o el macho montes (que son dos especies singulares), pero también el corzo, la liebre, el muflón, el zorzal, el gamo, la paloma, el conejo, el ciervo o el jabalí. Extremadura ocupa el territorio central de esta ‘región cinegética’.

Larga tradición

La Federación Extremeña de Caza sitúa este proyecto como una iniciativa más de difusión del alcance que tiene la práctica de la caza y recuerda que la región que integra este corredor tiene con una tradición cinegética que se practica desde hace cientos de años y que esa práctica «ha esculpido paisajes y ha servido para perpetuar sus poblaciones, gracias a los valores naturales y culturales de gran calidad ambiental y biodiversidad que posee». También destaca que la caza ha sido en este territorio un elemento de «lucha contra la despoblación en el mundo rural y una fuente de riqueza» puesto que se trata de «una materia prima importante para la industria turística sostenible. 

El movimiento Corredor Sudoeste Ibérico aglutina más de 70 iniciativas temáticas 

 El proyecto se ha integrado ya en la iniciativa del Corredor Sudoeste Ibérico, que trata de poner en valor este territorio de la península, más allá de la reivindicación del tren que se ha asociado tradicionalmente a esa denominación: «no estamos hablando de un tren o de un espacio concreto, sino de un sistema dinámico generado en un territorio como consecuencia de los flujos que producen las infraestructuras», explican en la web los promotores de esa iniciativa. H