«Exigir justicia y reparación urgente para Sara, víctima de la violencia vicaria (la que se ejerce sobre la madre a través de los hijos), desprotegida por el sistema y condenada por una justicia patriarcal». Es la causa por la que pelea la campaña de denuncia Mamá está castigada. Por ello, han convocado una concentración este sábado 29 de mayo en Badajoz, a las 12.00 horas frente a la delegación del Gobierno. La protesta está convocada por la asociación ‘Mujeres libres, mujeres en paz’.

El objetivo es apoyar a Sara B. B., una madre extremeña que lleva dos años separada de sus dos hijas (de 4 y 6 años).

La campaña #MamáEstáCastigada viene denunciado hace semanas lo que considera «las injusticias que Sara ha sufrido desde hace cinco años». Fue entonces cuando su médico activó el protocolo por violencia de género tras detectar indicios de malos tratos en una revisión de su segundo embarazo. «Ese día, Sara tuvo que huir con su hija mayor a casa de sus padres, temiendo las represalias de su expareja. Casi un año después interrumpió las visitas de la niña a su progenitor; lo hizo aconsejada por profesionales y después de que su hija verbalizara que sufría abusos», aseguran desde ‘Mujeres libres, mujeres en paz’.

«Su expareja la denunció por secuestro -continúan- y en 2019 la Policía de la Unidad de Atención a la Familia y la Mujer de Badajoz la detuvo, le arrebató a sus hijas y se las entregó a él, pese a que no tiene filiación paterna con una de ellas. El Consejo General del Poder Judicial reconoce en un informe que las juezas que ordenaron la separación incurrieron en prácticas medievales. Desde entonces, Sara no puede ver ni hablar con las niñas, aunque no exista ninguna orden de alejamiento ni de incomunicación».