El número de defunciones se incrementó un 16 % anual en Extremadura en 2020, marcado por la pandemia de la covid-19, hasta 13.060 en total, y la esperanza de vida ha bajado casi un año (81,8), según los datos provisionales que ha publicado este jueves el Instituto Nacional de Estadística (INE).

El número de defunciones en Extremadura ha sido el más alto de la última década, mientras que el menor fue en 2010 con 10.816. Desde entonces todos los años ha estado por encima de 11.000, pero nunca habían superado los 12.000.

El crecimiento de los fallecimientos en la región de 1.799 en términos absolutos, ha sido porcentualmente 1,7 puntos inferior a la media nacional; sin embargo, la tasa bruta de mortalidad por cada mil habitantes es de 12,3 en Extremadura, casi dos puntos por encima de la media española. La covid-19 provocó en total 1.072 muertos en la región hasta el 31 de diciembre de 2020, según datos de la Junta de Extremadura.

Por otro lado, Extremadura registró el año pasado 7.352 nacimientos, un 3,9% menos que en 2019, lo que supone la cifra más baja desde 2010; una caída porcentual que sin embargo, ha sido dos puntos inferior a la media nacional.

La tasa en Extremadura es de 6,94 nacimientos de madres residentes por cada mil habitantes. El número medio de hijos por mujer se sitúa en 1,19 en Extremadura, cifra casi idéntica a la tasa española (1,18).

Aunque el dato regional se ha reducido en 0,01 puntos, por primera vez en los últimos 18 años el número medio de hijos por mujer en Extremadura es superior a la media española, según el Instituto de Estadística de Extremadura (Ieex).

El crecimiento vegetativo de la población (nacimientos menos defunciones) presentó en la región un saldo negativo de 5.708. La esperanza de vida en Extremadura es de 81,8 años, frente a los 82,3 de la media autonómica, lo que supone un descenso de 0,99 años y de 1,28 años, respectivamente.

Datos Nacionales

Los datos sobre defunciones en España durante 2020 recabados por el INE revelan que en el año de la pandemia las defunciones se dispararon un 17,7 %, con 75.305 fallecimientos más que el año anterior, y 492.930 personas perdieron la vida en su conjunto.

En su estadística sobre el movimiento natural de población dado a conocer este jueves, el INE no especifica a qué motivos se debió el exceso de fallecimientos detectado el año pasado, pero los datos del Ministerio de Sanidad ya constataron en enero que hasta el 31 de diciembre de 2020 habían muerto 51.078 españoles por la covid-19.

Este aumento de la mortalidad en España ha hecho también que la esperanza de vida disminuya en 1,24 años, al situarse en los 82,34 años, y que el crecimiento vegetativo, esto es, la diferencia entre nacimientos y defunciones, sea negativo en 153.167 personas, frente a las 57.146 de 2019.