Lo dijo el consejero de Sanidad y Servicios Sociales de la Junta, José María Vergeles, en una de sus últimas ruedas de prensa. Uno de los asuntos preocupantes ahora mismo en la evolución de la pandemia en la comunidad es que los jóvenes que se están contagiando no podrán ser vacunados hasta dentro de seis meses, que es el plazo necesario que se debe esperar tras haber pasado la infección por covid-19. Esa realidad va a provocar el retraso en el camino hacia la inmunización, más aún teniendo en cuenta que la idea era que universitarios y adolescentes volvieran en septiembre a clase con la pauta completa, esto es, con la máxima protección posible frente al virus.

Pero según los datos que maneja la citada consejería, entre el 1 de marzo y finales de julio se han contagiado de covid casi 10.000 jóvenes menores de 29 años de la región (en concreto han sido 9.996). Significa que algunos podrán recibir las dosis en septiembre, pero otros deberán aguardar hasta octubre, noviembre, diciembre o incluso enero de 2022, dependiendo de la fecha en la que hayan dado positivo.

Más allá de que la sintomatología en la población de menor edad apenas exista o sea leve en la mayoría de los casos, estar en contacto con el virus tiene otros efectos colaterales.

No obstante, el Servicio Extremeño de Salud (SES) sigue adelante con el plan de vacunación y justo hoy tanto Vergeles como el director gerente del SES, Ceciliano Franco, van a presentar en rueda de prensa la puesta en marcha del sistema de ‘autocita’ para recibir el pinchazo contra el virus.

Ya se ha llevado a cabo una experiencia piloto en Mérida con 200 citas que se agotaron en apenas una hora. La idea es implantarlo en todas las áreas de Salud.