Tres colores son los que dan luz a su bandera: la superior, de color verde, la central blanca, y la inferior, negra. El Día de Extremadura conmemora las costumbres y tradiciones de la Comunidad Autónoma de Extremadura. Desde 1985, la fiesta en honor a la Virgen de Guadalupe que tradicionalmente reúne peregrinos pertenecientes a numerosos lugares de la península, fue elegida por el Parlamento autonómico como la celebración para representar dicha festividad. La principal razón es que la región es muy devota a la figura de la Virgen, coincidiendo este día, con su nacimiento.

Aunque el Día de Extremadura se encuentra ligado a la festividad de la Virgen de Guadalupe, tiene sus orígenes e historia propia. Es un día en el que se da importancia a todo aquello que conforma la cultura extremeña así como sus costumbres. 

Normalmente, todos los 8 de septiembre cada ayuntamiento de la región organiza un sinfín de celebraciones populares, de carácter institucional y cultural en su municipio, para conmemorar la fiesta regional por excelencia de la comunidad. Pero debido a las circunstancias actuales, este año la festividad ha adoptado un sentido diferente, tal y como ya lo vino haciendo el año pasado. 

Ayer ya dieron comienzo los actos programados con la entrega de medallas a los galardonados y el discurso ciudadano en honor a este día tan señalado para los extremeños. Esta vez se celebró en la sede de Presidencia de la Junta y no en el Teatro Romano de Mérida como venía haciendo cada año.

El propio día 8 de septiembre, las celebraciones están enmarcadas dentro de una misa conmemorativa en honor a Nuestra Señora de Guadalupe. Se celebra hoy a las 11.00 horas y será retransmitida por Canal Extremadura. No se llevarán a cabo procesiones o cualquier acto masivo, pero la Virgen podrá ser visitada y admirada por los guadalupenses y visitantes durante las horas que la basílica permanece abierta.