El año pasado, desde esta tribuna y con motivo de la celebración del Día de Extremadura, lanzaba un llamamiento a la esperanza. Una virtud que, sin duda, ejemplifica una mujer que ayer recibió una de las seis Medallas de Extremadura concedidas en este 2021. Se trata de Josefa Gómez, que en su pueblo natal, Campanario, es conocida como Josefita ‘la comadrona’.

Josefita fue una segunda madre para muchos campanarienses, que alumbró muchas vidas y que salvó otras cuantas. Y la Medalla de Extremadura es sin duda la mejor forma de rendir homenaje a todas las mujeres del mundo rural de una difícil generación, la de nuestras abuelas, que lo hicieron todo y se entregaron en vida. La sociedad salió adelante por ellas, tras una espantosa guerra y sus consecuencias. Por ello, a sus 97 años, Josefita es la viva estampa de la esperanza, pues ha representado a una generación que ha sido la más vulnerable en esta maldita pandemia, pero que fue la primera a la que protegimos con la vacuna que alumbró la Ciencia. Ella es sin duda una de esas ‘heroínas del mundo rural’, que en tiempos difíciles entregaron a los demás sus conocimientos para suplir los pocos medios con los que contaba.

Muchas mujeres han cogido ahora su relevo, de forma y cometidos distintos. En este sentido, no podía dejar pasar la oportunidad para tener un sentido recuerdo para una compañera, pero sobre todo amiga, que siempre apostó por el mundo rural. Charo Cordero, alcaldesa de Romangordo y presidenta de la Diputación de Cáceres luchó hasta el último minuto de su vida por la tierra a la que tanto amó; se volcó por y para la mujer de cara a mantener vivo al mundo rural, que defendió a ultranza, y además también apostó por la cooperación para el desarrollo. Nadie como Charo había interiorizado, impulsado y promovido la solidaridad con los pueblos y ciudadanos del mundo como lo hizo ella estando al frente de Felcode. Entre los recuerdos que siempre guardaré está el de haber compartido con ella la lucha por la igualdad de oportunidades para todos los vecinos de nuestras respectivas provincias, independientemente de su lugar de residencia.

Considero de justicia que el ámbito rural disponga de los mismos servicios públicos que el urbano o, al menos, en la proporción que mejore la calidad de vida de sus vecinos. Por ello, desde la Diputación de Badajoz no íbamos a consentir, por ejemplo, que en nuestros pueblos imperara el apagón financiero y gracias al Plan de Lucha Contra la Exclusión Financiera, hemos instalado 30 cajeros automáticos en pueblos que se quedaron sin entidad bancaria. De esta forma, sus vecinos no tendrán que desplazarse a otras localidades próximas.

Tal iniciativa ha hecho que la provincia de Badajoz se sitúe entre las que cuentan con una mayor accesibilidad al dinero en efectivo del país, con un porcentaje de solo un 0,4% de población sin puntos de acceso; es decir, ni sucursal bancaria con ventanilla ni cajero automático.

Tampoco hemos querido dejar atrás a las pequeñas poblaciones ante un problema tan sensible y preocupante como la depuración de sus aguas. De hecho, el Consorcio de Gestión de Servicios Medioambientales de la Diputación de Badajoz, Promedio, tiene a día de hoy en marcha la totalidad de las actuaciones de nuevas depuradoras en 28 localidades contempladas en el Primer Plan de Infraestructuras del Plan Depura 2020-2023.

Nuestro compromiso es firme y prueba de ello es que ya se avanza de forma satisfactoria en la ejecución de la primera fase del Plan Depura, que contempla una inversión de 16,6 millones de euros para que antes de 2024 haya operativas 20 nuevas depuradoras y estén listos 8 proyectos de obra para su puesta en marcha en el siguiente periodo.

Y es que en nuestra hoja de ruta estará siempre el de priorizar el uso de recursos para quienes más lo necesiten. Prueba de ello es el Plan de Accesibilidad, con una inversión de 1,1 millones de euros para dotar con un elemento accesible a todos los municipios de la provincia, incluidas las entidades locales menores. Éstos han tenido libertad para elegir entre la instalación de columpios adaptados en los parques infantiles; la instalación de bucles magnéticos en las dependencias municipales y a disposición de las personas con discapacidad auditiva o la habilitación de plataformas adaptadas para entrar en las piscinas así como sillas de desplazamiento para duchas.

En definitiva, se trata de iniciativas desde la provincia para contribuir a hacer región. Y es que considero que la colaboración entre administraciones es vital para seguir creciendo y generando oportunidades para nuestros vecinos. De hecho, en el Plan de Sostenibilidad Turística de la Reserva de la Biosfera de La Siberia, que acaba de arrancar, tenemos un extraordinario ejemplo: aunando esfuerzos podemos ofrecer vida y desarrollo a una comarca injustamente olvidada. Durante los tres próximos años, y gracias a los 2,4 millones de euros aportados por el Gobierno central, la Junta de Extremadura y la Diputación de Badajoz, se trabajará en una fuerte promoción de los recursos patrimoniales, naturales y paisajísticos de La Siberia, con el turismo de naturaleza como base.

Una comarca que, como pudo verse en el magnífico escaparate que supuso la Vuelta Ciclista a España a su paso por nuestra comunidad, puede presumir de kilómetros y kilómetros de costa dulce.

Este 8 de septiembre, nuestra comunidad autónoma puede sentirse orgullosa de sus nuevas Medallas de Extremadura.

Además de Josefita, podemos presumir del joven José María Fernández de Vega, por su capacidad de emprendimiento y creatividad en un mundo tan complicado como el audiovisual. En el apartado deportivo, el atleta paralímpico ‘Quini’ Carrasco ha sido merecedor de la máxima distinción por su coraje y espíritu competitivo para saber sortear las barreras. Mientras que el colegio San Antonio de Padua de Cáceres, así como los institutos Zurbarán y Bárbara de Braganza, de Badajoz, recibieron la distinción por su decidida apuesta por una educación de calidad.

Los nombres de estas Medallas son el paradigma perfecto de la permanente esperanza y horizonte de futuro para la tierra a la que tanto amamos. Feliz Día de Extremadura. 

*Presidente de la Diputación de Badajoz