La venta de los test de antígenos rápidos para detectar posibles casos de coronavirus se reactiva en las farmacias extremeñas, ya que son muchos los ciudadanos que los están adquiriendo como medida preventiva para saber si están contagiados a la hora de asistir a las reuniones familiares, de compañeros de empresa o de amigos propias de estas fiestas navideñas. Tras varias semanas con las ventas más estancadas, principalmente por la bajada en la incidencia de contagios, la comercialización de estas pruebas de autodiagnóstico se ha incrementado considerablemente en lo que va de mes. Cabe destacar que aparte de estos encuentros navideños, otros factores a tener en cuenta para explicar este aumento de la demanda son la subida de los contagios y los desplazamientos. Por el momento, no hay que reseñar problemas generalizados de desabastecimiento en estos puntos oficiales de venta

El presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Cáceres, Pedro Claros, sostiene que en la actualidad «existe muchísima demanda porque hay mucha gente responsable que quiere hacer test a sus hijos para cuando vayan a visitar a sus abuelos, ya que muchos menores todavía no están vacunados». En esta línea, apunta que las pruebas también se están comprando por parte de quienes van a acudir a alguna reunión familiar o de amigos, aunque ni siquiera presenten síntomas de infección. Estos test son una herramienta «fácil, económica y rápida» que ayuda a «dar cierta tranquilidad a las personas si el resultado es negativo». A pesar de ello, hay que tener en consideración que dar negativo no excluye la posibilidad de infección, ya que puede ser que en el momento de realizar el test la carga viral sea aún demasiado baja para ser detectada como positivo, por lo que la persona podría transmitir igualmente el virus. 

Por su parte, el presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Badajoz, Cecilio Venegas, considera que la venta de test covid rápidos está en alza por la confluencia de diferentes factores, que a su juicio serían los encuentros navideños, el incremento de los contagios, el temor a un posible desabastecimiento y los viajes. «Muchas personas están adquirieron ya los test aunque no los vayan a usar de inmediato por si más tarde no hubiera», afirma Venegas, quien no cree que las farmacias se vayan a quedar sin unidades, ya que estas «han hecho acopio de test precisamente de cara a estas fechas». Venegas incide en la idea de que algunos clientes compran estas pruebas sin presentar síntomas, prueba de ello es que en su farmacia ha detectado a varios positivos que eran asintomáticos.

Los test de antígenos sin prescripción médica se pueden comprar en las oficinas de farmacia desde el pasado mes de julio. El precio de venta es libre, por lo que una unidad puede costar entre 4 y 10 euros, y también se venden paquetes de cinco unidades. Desde la farmacia 24 horas Amelia Berbén, de Badajoz, indican que desde el pasado puente de la Constitución «sí está habiendo más movimiento en las ventas por las comidas y reuniones de familiares o amigos». Por otra parte, desde la farmacia Irene Mateos, ubicada en Mérida, señalan que están percibiendo un incremento en la venta de test de antígenos «por las reuniones familiares en las que hay personas con edad avanzada y por la subida de los contagios». «Antes del puente de diciembre fueron muchos los que compraron los test para viajar y se agotaron», añaden desde la farmacia emeritense Ignacio Ramírez.  

El test rápido de antígenos sirve para detectar una infección activa por coronavirus. En las farmacias se venden estas pruebas en dos modalidades, en concreto, las que se llevan a cabo mediante una muestra nasal o de saliva, aunque la mayoría de los ciudadanos optan por la nasal, en la que el usuario debe introducir un bastoncillo por las fosas nasales 2,5 centímetros. Para que el resultado sea fiable, la prueba se debe realizar tal y como marcan sus instrucciones, ya que un mal uso puede llevar a un falso resultado. Si la prueba es positiva, y al margen de que se tengan síntomas o no, la persona debe autoaislarse y contactar con el Servicio Extremeño de Salud (SES). En caso de ser negativo, no hay que descartar la enfermedad porque la carga viral puede ser muy baja para ser detectada.