Es la primera confirmación oficial pública que la Junta hace con respecto a la futura fábrica de baterías que Volkswagen tiene previsto instalar en España: «Extremadura está en la liza», manifestó este miércoles la consejera para la Transición Ecológica y Sostenibilidad, Olga García. Destacó que, más allá del respeto por los tiempos que requieren las empresas para la adopción de decisiones, «lo importante» es que la comunidad está entre las candidatas para albergar este goloso proyecto. «Somos sensibles y respetuosos con los tiempos que requieren las empresas para esa toma de decisiones», insistió; y defendió que, en todo caso, Extremadura es un emplazamiento «realmente interesante» no solamente para la instalación de la citada fábrica de baterías de litio, sino para «muchos otros» proyectos industriales.

La comunidad compite, por ahora, con Sagunto (en Valencia) y Aragón, que no se ha descartado

«Tenemos los recursos suficientes como para que seamos competitivos: territorio, potencia eléctrica, recurso solar, agua, estabilidad social, seguridad jurídica... y por tanto lo importante es que Extremadura está en la liza», reiteró en Mérida en una rueda de prensa en la que presentó el balance de las obras hidráulicas durante 2021.

El vehículo eléctrico

Lo cierto es que el litio se ha convertido en el nuevo ‘oro líquido’ a nivel europeo y Extremadura lleva varios ya años en la carrera para ser parte del nuevo mercado del vehículo eléctrico, cuyas baterías necesitan ese elemento. La región tiene en Cañaveral uno de los proyectos mineros más avanzados en la península para iniciar la extracción de litio y otros dos proyectos industriales de menor tamaño para fabricar celdas de batería y cátodos. 

De momento, la comunidad aparece como una de las posibles aspirantes al proyecto de Volkswagen junto con Sagunto (en Valencia) y Aragón, que no se ha descartado del todo.

Expacio Navalmoral se prepara para acoger a grandes industrias

La decisión dependerá en última instancia de las empresas, pero el polígono empresarial Expacio Navalmoral se está poniendo a punto para acoger la posible llegada de proyectos industriales de gran envergadura, según los pasos que ha ido dando la Junta de Extremadura en el último año. El más reciente es el que se ha publicado este mes de enero en la Plataforma de Contratación del Sector Público, destinado a llevar agua desde el embalse de Valdecañas al polígono empresarial moralo, a través de una conducción de 12 kilómetros, que se licitará en 2023 y estará ejecutado previsiblemente a finales del 2024. Lo que se licita ahora es la redacción del proyecto. 

Desde la Junta de Extremadura eluden mencionar propuestas concretas, pero sí avanzan que «hay varios proyectos industriales mostrando interés por emplazarse en Extremadura y una de las posibles ubicaciones que se baraja es Expacio Navalmoral», y que esta actuación responde a las demandas que se ponen sobre la mesa. La cuestión es que «las necesidades de agua manifestadas por estos proyectos requieren de estas nuevas infraestructuras, y por ello ya estamos proyectando la mejora de las dotaciones existentes hoy en día», concretan desde la Consejería de Transición Ecológica. 

Hay otro lote en la misma licitación destinado a mejorar también los recursos del sistema de abastecimiento del embalse de Santa Lucía en Trujillo, que Transición Ecológica vincula igualmente al interés de algunas industrias por instalarse en esa zona. De momento el que ha trascendido allí es el destinado a fabricar diamantes artificiales para uso industrial orientados a sustituir a los chips.

La plataforma logística está en licitación y las empresas interesadas también demandan agua

¿Y en Navalmoral? No se ha confirmado ningún proyecto de gran envergadura de forma oficial por el momento (más allá del de guantes de nitrilo). Está por un lado la posibilidad de que vaya allí la planta de cátodos por ubicar, pero sigue también sin concretarse la factoría de baterías que el gigante Volkswagen anunció en España. Es el gran proyecto del PERTE de la automoción y Extremadura está desde hace semanas entre las favoritas de las quinielas para acoger ese proyecto. Las 336 hectáreas que tiene este polígono, la dotación de agua que le proporcionará la citada licitación en marcha (y que requieren ese tipo de industrias) y la plataforma logística ya en trámites por parte de Adif, añaden posibilidades a este emplazamiento como receptor de grandes proyectos a corto plazo. 

La ejecución de la plataforma logística se reactivó el año pasado y se aceleró a través de un convenio entre la Junta de Extremadura y Adif para que la empresa pública se ocupara de llevar a cabo todas las actuaciones y cumplir con los plazos de las ayudas europeas destinadas a su puesta en marcha. La previsión es que esté terminada en 2023.