La comunidad terapéutica Casa Roja de Llerena (Badajoz) lanza un SOS. Detrás de este recurso creado en el 2003, y destinado a ayudar a las personas con adicciones asociadas a un trastorno mental, está la Asociación de Lucha contra la Droga (Alucod), una entidad conformada en 1990 que ofrece una atención integral a estas personas «favoreciendo su inserción social y laboral» y que ahora tiene la espada de Damocles sobre su cabeza. 

«El Servicio Extremeño de Salud (SES) nos ha comunicado por email, con un documento muy escueto de dos párrafos, que deja de financiar este recurso desde el 1 de enero de 2022, lo que supone también la liquidación de la entidad», señala la asociación en una nota de prensa. Así, este recurso no cuenta con subvención para este año en los presupuestos generales de la comunidad. 

En el escrito remitido, la administración «agradece la labor prestada durante tantos años» y pide al colectivo que «desaloje el recurso a partir del 1 de febrero y mantenga en las instalaciones todos los bienes que fueron aportados en el 2003 por el Servicio Extremeño de Salud».

Alucod «no entiende esta decisión», que considera precipitada y de falta de sensibilidad y empatía, ya que «no tiene en cuenta la estabilidad de las personas ingresadas en la comunidad terapéutica y les obliga a interrumpir de forma inmediata el tratamiento que han llevado a cabo durante meses, provocando la desestabilización de estas personas, al separarlos de sus profesionales de referencia», añade el comunicado. 

Según explica el colectivo, los usuarios que han querido continuar su tratamiento han sido derivados a otros centros de la Red de Atención a Conductas Adictivas de Extremadura, pero «la gran mayoría de ellos han decidido finalizar su tratamiento en Casa Roja, permaneciendo hasta el último día permitido por el SES aunque esto signifique la interrupción de su tratamiento antes de tiempo, agravando la situación individual, familiar y social, lo que merma las garantías de éxito». 

Quedarse sin la subvención nominativa que cada año aportaba la Junta a este recurso, «provoca en Alucod una falta de solvencia absoluta para poder continuar con su labor y el cierre del resto de recursos adjuntos al programa de Comunidad Terapéutica, como por ejemplo, los talleres ocupacionales y Alucod Reciclaje, empresa dedicada a la integración laboral de personas en riesgo de exclusión social».