Iniciar las obras de la autovía Cáceres-Badajoz, licitar nuevos tramos de las rondas urbanas, comenzar la construcción del nuevo puente de Alcántara o los estudios informativos para el desdoblamiento de las carreteras de Badajoz a Olivenza, de Montijo a Puebla de la Calzada y la futura autovía Zafra-Jerez. Son algunos de los proyectos que la Junta de Extremadura prevé ejecutar a lo largo de este año con cargo al Plan Estratégico de Infraestructuras 2016-2030, cuya ejecución a día de hoy cifra en un 74%.

La consejera de Movilidad, Transporte y Vivienda, Leire Iglesias, ha ofrecido los datos este jueves en el pleno de la Asamblea, donde ha comparecido a petición del PP para informar de la ejecución del programa en lo que se refiere a carreteras. Según ha explicado, de las 103 actuaciones que se recogen en el documento, 77 están "finalizadas, en ejecución, licitadas o gestionadas para su ejecución". Iglesias, que asegura que la planificación se está cumpliendo "de norte a sur", ha destacado que con este plan se han conseguido proyectar y finalizar obras como el tramo 2 de la ronda sureste de Cáceres y el tramo 3 de la ronda sur de Badajoz, que entró en servicio el pasado 14 de enero con una media de 2.922 vehículos al día en circulación.

“Las infraestructuras viarias no son malas. Faltan algunas por exigir, otras por desarrollar y cuando acabe la legislatura sin duda serán mejores”, ha destacado frente a las críticas del PP, que rebaja la ejecución del plan apenas al 8%. Una media de 20 millones anuales, ha calculado el diputado Víctor del Moral, que asegura que al ritmo actual serán necesarios 75 años para cumplirlo.

En la misma línea se ha expresado el diputado de Ciudadanos Joaquín Prieto, para quien «da la sensación de que la ejecución no llega al 10%». Sin embargo, Iglesias ha insistido en el aumento de la inversión pública (un 154% más entre 2019 y 2021, según sus datos) y el compromiso del Gobierno central para «desempolvar» proyectos históricos. 

Como ejemplo, la autovía que unirá Cáceres y Badajoz, la futura A-58. Desde noviembre está «dispuesta para salir a licitación» y según Iglesias, las obras comenzarán en este 2022. «La cesión de la titularidad al Estado permitirá que, teniendo ya una primera reserva presupuestaria, el inicio de ejecución de esta obra se pueda producir con seguridad este ejercicio», ha asegurado.

En esta legislatura

La autovía entre Cáceres y Badajoz se prometió en el año 2006 con fondos autonómicos y un coste cifrado en más de 360 millones de euros, pero 15 años después el proyecto apenas ha arrancado. El Estado asumió la inversión en 2019 tras la cesión de la carretera por parte de la Junta, si bien el compromiso de Pedro Sánchez de terminarla en esta legislatura será difícil de cumplir porque los pasos que se han dado han sido mínimos. 

Tan solo se ha ampliado la rotonda de acceso a la capital cacereña, unas obras que en marzo de 2021 supusieron el primer movimiento de tierras tras 15 años de parón absoluto y que se acometieron para impedir que la declaración de impacto ambiental, que data de 2009 (cuando la Junta tenía previsto construirla con sus propios fondos), terminara caducando.

La previsión para 2021 era licitar un primer tramo de 13 kilómetros, que tampoco se ha cumplido. Según Leire Iglesias, todo está dispuesto para ello desde el mes de noviembre, pero nada se sabe aún de fechas. Hay que recordar además que el trayecto hasta Badajoz son 81 kilómetros de vía con, en numerosas ocasiones, abundante tráfico. Y en los presupuestos de 2022 la inversión cae de 10 a cuatro millones de euros.

Del Moral ha afeado a la consejera que siga computando esta obra dentro del plan de infraestructuras autonómico puesto que tras la cesión al Gobierno se construirá con fondos estatales. «O nos estamos perdiendo algo, o se trata de obras del metaverso», ha señalado.