Menos trasplantes pero más donación de órganos. Las «dificultades asistenciales» derivadas de la crisis sanitaria de la covid-19 han hecho que Extremadura realice un 10% menos de trasplantes en 2021, un año en el que sin embargo se donaron 48 órganos, dos más que 2020, y más de 50.000 bolsas de sangre que hicieron posible esas intervenciones. Sigue habiendo 143 personas en lista de espera, pero de cara a 2022 el sistema mira a la recuperación y pone la esperanza en dos nuevas vías para aumentar estas cifras: la donación inter vivos y en asistolia.

El consejero de Sanidad, José María Vergeles, y el coordinador autonómico de trasplantes, Luis López, han analizado este jueves en rueda de prensa los datos de la memoria anual de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), que sitúa a Extremadura como una de las comunidades con mayor tasa de donación: 45,7 órganos por millón de habitantes frente a una media nacional de 40,2. 

Sin embargo, en las intervenciones se registra una caída del 10% que contrasta con el dato de España, donde la actividad se recupera y crece un 8%. En Extremadura se practicaron 65 trasplantes el año pasado, en concreto 40 renales (dos de ellos inter vivos,) y 25 de hígado. Son, junto al trasplante de córnea, los tres procesos que se realizan en la región y la lista de espera es de 143 personas: 75 esperan un trasplante de riñón, tres hepático y 65 de córnea. 

Más actividad

Vergeles ha confiado en que este año el afrontamiento de la pandemia en los hospitales sea «más suave», como ha demostrado la sexta ola, y poder normalizar así la actividad de donación y trasplantes tras dos años en los que se han vivido momentos «verdaderamente complicados». 

De hecho, ha sido necesario incluso que la ONT adapte los protocolos para poder realizar donaciones en un contexto de positividad persistente en covid, lo que ha permitido «contar con un órgano que podía salvar una vida». 

Por otra parte, se seguirá trabajando «intensamente» en la donación en asistolia (los órganos que provienen de una persona en parada cardiorrespiratoria), para ampliar la red de hospitales que detectan cuándo se puede producir. En 2021 el 28,8% de las donaciones de Extremadura se produjeron por esta vía, frente al 72,9% de muerte cefálica.

Por su parte, el coordinador de trasplantes, Luis López, ha apuntado también que estos dos últimos años han sido «complicados» por varias razones. Entre ellas asegurar que los receptores no pudieran contagiarse de covid-19, ya que se trata de personas con riesgo muy elevado al anularse sus defensas parque no rechacen el trasplante. En general, López ha hecho una valoración «positiva» de los datos, si bien se ha marcado como objetivo llegar a unos 50 trasplantes renales y entre 20 o 30 hepáticos al año. 

Al margen de los órganos, Vergeles también ha destacado en su intervención el aumento de las donaciones de sangre, con 1.251 unidades más en 2021. En Extremadura se obtuvieron 50.366 bolsas frente a las 41.115 del año anterior y se han incorporado 4.600 nuevos donantes, una cifra «muy cercana» al objetivo del Banco de Sangre de aumentar un 10% el número de nuevos donantes cada año.