Agentes de la Guardia Civil están escoltando camiones cisterna para garantizar que el suministro de carburantes de automoción llegue a las gasolineras extremeñas, en algunas de las cuales se están produciendo ya problemas de abastecimiento tanto de gasóleo como de gasolina. Según informan fuentes de la Delegación del Gobierno en Extremadura, durante la jornada de hoy se han escoltado un total de trece camiones distribuidos en varios convoyes para llevar el combustible desde las instalaciones de CLH en Mérida hasta diferentes puntos de la región. Durante los últimos días, gasolineras ubicadas en localidades como Badajoz, Olivenza, La Codosera, Villanueva del Fresno, Puebla de Obando o Torre de Santa María se han llegado a quedar sin alguno de los carburantes que comercializan a causa del paro del sector del transporte. “Probablemente haya muchas más”, señala Fernando Mena del Pueyo, presidente de la Asociación Regional de Empresarios de Estaciones de Servicio de Extremadura (Aresex), que apunta que la información de  este tipo que le han ido comunicando durante la mañana de hoy desde las estaciones de servicio asociadas “es un goteo que no para”. Al menos hasta las ubicadas en Puebla de Obando y Torre de Santa María sí han llegado esta mañana camiones acompañados por efectivos de la Benemérita, según se confirmó desde la patronal extremeña de las estaciones de servicio.

“Posiblemente me quede sin gasóleo convencional a lo largo de este mediodía”, explica el responsable de una estación de servicio de Navalmoral de la Mata, al que el pedido le tendría que haber llegado el sábado por la tarde. Apenas le quedan ya unos 1.500 litros del los 40.000 con los que cuenta su tanque para este combustible. “Esta mañana me han dicho que ha salido el convoy”, cuenta, si bien apostilla que aún no sabe si le llegará o no en el transcurso de la tarde. Por lo demás, “hoy está todo muy tranquilo, muy parado, la gente se movilizó más por los precios que por posible falta de suministro”.

En este sentido, el presidente de Aresex puntualiza que las ventas en las estaciones extremeñas están siendo “entre un 30% y un 40%” menores de lo habitual, lo que está retrasando en algunos casos que se agoten las existencias. Este menor volumen de ventas se debe, por un lado, a la drástica reducción del consumo por parte de camiones y de furgonetas de reparto. Pero también a que hay “mucho particular que llenó el depósito la semana pasada” ante la posibilidad de que el precio de los carburantes siguiese en la misma línea ascendente. Igualmente, señala que las operadoras están priorizando el suministro de las estaciones de servicio sobre la venta directa que realizan empresas distribuidoras a explotaciones agrícolas o comunidades de propietarios que emplean el gasoil para calefacción. Distribuidoras en las que el abastecimiento comienza a estar también comprometido, subraya.