Unicaja Banco desinstalará el cajero automático en 35 de las 64 oficinas que tiene previsto cerrar en Extremadura en la segunda y tercera fases del plan de reordenación de su red. Lo mantendrá en otras veinte, mientras que en las nueve sucursales restantes de las que tiene planteado prescindir en los próximos tres meses en la comunidad autónoma no contaba ya con este dispositivo. 

De acuerdo a la información facilitada por la propia entidad a los trabajadores, los cajeros que desmantelará están ubicados fundamentalmente en localidades de pequeño tamaño, mientras que ocho de los que seguirán operativos se encuentran en poblaciones mayores donde el banco seguirá contando con otras oficinas abiertas. 

La segunda fase del proceso de ajuste contempla la clausura de 26 oficinas en territorio extremeño (mismo número que incluyó la primera, que acaba de materializarse). En diez de ellas permanecerá el cajero automático. Será en Navas del Madroño, Talaván, Torrecillas de la Tiesa, Aldeanueva del Camino, Cañamero, Carcaboso, Madrigal de la Vera, Perales del Puerto, Calamonte y Oliva de la Frontera. Por el contrario, dejará de haberlos en los locales que actualmente ocupan sus oficinas de La Cumbre, Navezuelas, Alía, Cadalso de Gata, Caminomorisco, Casas del Monte, Eljas, Garganta la Olla, Guijo de Granadilla, La Pesga, Mohedas de Granadilla, Torre de Don Miguel, Torrecilla de los Ángeles, Valverde de la Vera, Campo Lugar, y Casas de Don Pedro. En todos los casos, la red de procedencia es la de Liberbank, entidad absorbida por Unicaja. El último día de atención al público se moverá entre el 20 y el 22 de abril.

En cuanto a la tercera fase, supone el cierre de otras 38 oficinas extremeñas, que dejarán de atender a los clientes el 17 de junio. De ellas continuarán con cajero automático las oficinas de Jarandilla de la Vera, Moraleja, Navalmoral de la Mata, Plasencia (avenida Alfonso VIII, Cañada Real y Polígono Industrial), Talayuela, Arroyo de la Luz, Cáceres (avenida de París) y Don Benito. El servicio se deshabilitará, en cambio, de las sucursales cuyo cierre se plantea en Coria, Cuacos de Yuste, Hervás, Jaraíz de la Vera, Montehermoso, Navaconcejo, Pinofranqueado, Riolobos, Torrejoncillo, Almendralejo, Badajoz (avenida Colón y Valdepasillas), Cáceres (avenida Virgen del Guadalupe), Mérida, Miajadas, Montánchez, Trujillo, Valencia de Alcántara, y Zafra.

Por último, en el listado elaborado por el banco aparecen otras nueve oficinas en Extremadura que ya carecían de cajero automático: Casar de Palomero, Casas del Castañar, Castañar de Ibor, Serradilla, Tornavacas, Vegaviana, Membrío, Torreorgaz y Zurbarán.  

El sindicato Cesica-Sibanca, el de mayor representatividad en Unicaja entre los que no firmó a finales del año pasado el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) negociado con el banco, mostró hoy su «inquietud ante la falta de transparencia sobre los criterios que se han tenido en cuenta para decidir los cierres de oficinas que se han anunciado». A juicio de esta central sindical, «en demasiados casos», las clausuras «no tienen lógica de negocio. Se hacen con visión cortoplacista y nos abocan a pérdida de clientes y negocio justo antes de un más que previsible cambio en el escenario de tipos de interés» que tendrá efectos en «las cuentas de resultados de todas las oficinas».

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A través de una circular, afirmó que «parece que se abandonan determinadas localidades en una búsqueda de retorno inmediato, vía reducción de costes de explotación, comprometiendo la viabilidad y rentabilidad futura de la entidad», al tiempo que se recordó que los cierres, que serán unos cuatrocientos en toda España, «también tendrán consecuencias en el proceso de movilidad del ERE que comenzará próximamente, en virtud del cual, las personas trabajadoras sufrirán la arbitrariedad y la carencia de transparencia». 

Por otro lado, ayer lunes el banco comunicó a un grupo de trabajadores incluidos en el ERE su salida de la empresa el próximo 30 de abril. Según las estimaciones de UGT, con ellos ya tienen fecha para dejar la entidad «más del 35% de los compañeros afectados».