Tras dos años en vigor, Extremadura deja atrás los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que se activaron durante la pandemia. El pasado jueves finalizó la última prórroga acordada entre el Gobierno central y los agentes sociales de esta herramienta que se desplegó a mediados de 2020 para hacer frente a la destrucción de puestos de trabajo que venía ligada a la crisis sanitaria del coronavirus. La reforma laboral mantiene, con algunas modificaciones, los antiguos ERTE regulados en el artículo 47 del Estatuto de los Trabajadores, esto es, por causas ETOP (económicas, técnicas, organizativas o de producción ) o de fuerza mayor. Como novedad, se crea el Mecanismo RED, un instrumento de carácter permanente para que las empresas puedan acogerse a ERTE especiales con bonificaciones en determinadas circunstancias. 

Desde marzo de 2020, más de 50.000 trabajadores de la región estuvieron acogidos a los ERTE extraordinarios por el covid. Según los datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Extremadura finalizó el año 2021 con 449 ERTE derivados de la pandemia, que afectaban a 1.197 trabajadores, frente a los 2.112 expedientes y 5.407 trabajadores con los que terminó 2020. Los últimos datos disponibles, que son relativos al pasado mes de febrero, apuntan a que 436 empresas y 1.100 trabajadores extremeños estaban acogidos a este mecanismo. Desde el 1 de abril, todos los empleados han tenido que ser reincorporados en sus puestos de trabajo y, posteriormente, las empresas que requieran realizar nuevos ajustes en las plantillas deben negociar con la representación legal de los trabajadores para adoptar los nuevos mecanismos. 

«Los ERTE de la pandemia fueron la salvación, de no haber sido así, estaríamos hablando de un desempleo sangrante en la región», destaca el secretario de Acción Sindical y Laboral de CCOO de Extremadura, Alberto Franco. Sobre este asunto, recuerda que en el año 2019 apenas se registraron siete u ocho ERTE en Extremadura, mientras que a partir de marzo de 2020 empezaron a notificarse «cientos de ERTE cada día». «Durante la pandemia, los ERTE se les daban a prácticamente todas las empresas. La propia Junta de Extremadura, que es la autoridad laboral competente, tuvo que decir que todos los que se presentaran se iban a aprobar», subraya. Con los ERTE habilitados en la pandemia «los trabajadores los sufrimos más, porque cuando el empresario presentaba un ERTE se ahorraba las cotizaciones sociales y los salarios, pero nosotros cobrábamos el 70% de nuestra base de cotización». «A partir de ahora los ERTE serán muy exiguos, quizás se den en algunos sectores como hostelería y agencia de viajes, pero poco más», puntualiza.  

«Los ERTE sirvieron para la función que tenían, para que en un periodo como la pandemia no se despidiera a los trabajadores y que fuera diferente la crisis actual a la de 2008 en la que hubo muchísimos despidos», sostiene el secretario de Política Institucional y Empleo de UGT Extremadura, Francisco Morcillo. «Se ha demostrado que funciona el que haya ERTE en lugar de despidos». A su juicio, es «importante» que tras la aprobación de la reforma laboral «vuelva a coger un peso importante la representación legal de los trabajadores, tanto para la negociación de los ERTE como de los convenios». «Ahora es más importante que nunca tener una representación legal establecida», apunta Morcillo. 

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El secretario general de la Confederación Regional Empresarial Extremeña (Creex), Javier Peinado, considera que la finalización de los ERTE covid llega «en el peor de los momentos». «Estamos en una crisis económica motivada por otros factores que se complementan con el covid, como todo lo generado con el incremento de costes de materias primas, energéticos, dificultades de suministro o lo que está generando el riesgo geopolítico de la guerra de Ucrania, que están haciendo que haya que irse también a ERTE de fuerza mayor», indica. «No sabemos si al final vamos a poder enfocar los nuevos ERTE como causa de fuerza mayor también o vamos a tener que ir a los tradicionales ERTE por las causas ETOP», señala Peinado.

Los mecanismos de la reforma laboral

La reforma del mercado laboral, aprobada el pasado 28 de diciembre, contempla nuevos mecanismos para las empresas que quieran acogerse a una regulación temporal de empleo. Los modelos mantienen la prestación para los trabajadores, pero difieren de los expedientes covid en las bonificaciones para las empresas, en función del tipo y de si se da formación o no a los empleados.

El ERTE ETOP es un expediente de suspensión o reducción de jornada que se basa en causas objetivas de tipo económico, técnico, organizativo o productivo. En este caso, no se requiere la aprobación de ninguna autoridad laboral. Las exoneraciones en las cotizaciones a la Seguridad Social son del 20% y están condicionadas a la realización de acciones formativas. Una de las finalidades de este ERTE ETOP y de las medidas que contempla es evitar despidos.

A diferencia de esta modalidad, el ERTE por fuerza mayor temporal sí que requiere ser autorizado por una autoridad laboral, la cual debe comprobar que realmente existe una causa de fuerza de mayor que justifique su aplicación. Añaden como causa específica, que ya se aplicó en la pandemia, el impedimento o limitación a la actividad por decisiones de la autoridad gubernativa. Las exoneraciones serán del 90 % ligadas a un compromiso de mantenimiento del empleo de seis meses.

La reforma laboral incluye una tercera modalidad de ERTE, el denominado Mecanismo RED, que debe activar el Consejo de Ministros en situaciones de crisis, por un máximo de un año y con exoneraciones decrecientes del 60% al 20%. También cuando sea necesaria la reestructuración de un sector, en ese caso con un duración de seis meses prorrogables a un año y con rebajas en las cuotas a la Seguridad Social del 40%. En ambos casos, las exoneraciones para las empresas están vinculadas al desarrollo de acciones formativas y los trabajadores percibirán una prestación del 70% de la base reguladora durante todo el periodo, que no consumirá paro. El pasado martes, el Consejo de Ministros aprobó este mecanismo para las agencias de viajes, que podrán acogerse a uno de estos expedientes para situaciones de reestructuración sectorial.