La Junta de Extremadura tiene filiados a 376 refugiados ucranianos, pero lo cierto es que han sido muchos más los que han venido a la región a iniciativa propia, ayudados por iniciativas ciudadanas o en tránsito hacia otros países como Portugal.
Marta Pizarro, responsable del área en Cruz Roja Extremadura, cifra en 1.371 las personas que la ONG ha atendido desde el inicio del conflicto bélico. En su mayoría se trata de personas que han recalado de paso en el albergue del Revellín, en Badajoz, pero Cruz Roja también presta atención de forma permanente a otras 29 personas refugiadas (12 de ellas niños) en el albergue de Olivenza, que prevé completar las 22 plazas que aún quedan libres en las próximas semanas.
En Cáceres, la ONG Accem trabaja ya en los últimos preparativos para que el albergue municipal de Valhondo pueda acoger refugiados, con la previsión de abrir la próxima semana. Las instalaciones se encuentran en el barrio de San Blas y tienen una capacidad para al menos medio centenar de personas.
Fueron los propios vecinos los que después de meses cerrado, pidieron que se reabriera a los turistas pero el ayuntamiento lo descartó alegando que ya existe una oferta privada de similares características. Finalmente, el inmueble se destinará como alojamiento para las familias que lleguen a la ciudad procedentes de Ucrania, tanto para instalarse como para las que lleguen de paso.
El albergue de Olivenza tiene alojadas a 29 personas desde el pasado 18 marzo. Los últimos tres usuarios llegaron el pasado miércoles y la previsión es completar el total de plazas disponibles en las próximas semanas. Los primeros ucranianos llegaron hace tres semanas a las instalaciones cedidas por el Ayuntamiento de Olivenza a Cruz Roja, ciudadanos que «llevan una vida normal en el municipio, pues asisten a actos culturales y socializan con la ciudadanía oliventina», según ha informado el ayuntamiento en un comunicado.
La Agencia Extremeña de Cooperación recuerda que las muestras de solidaridad hacia el pueblo ucraniano deben realizarse a través de donativos económicos a las ONG que colaboran en Extremadura.
Desde la fecha en que comenzó el conflicto bélico ya son más de 10 millones de personas las que se han visto obligadas a abandonar sus hogares en busca de seguridad, casi una cuarta parte de la población. Estas cifras incluyen a unos 7,1 millones de hombres, mujeres y niños desplazados internamente, y a 4,2 millones de personas que han cruzado las fronteras de Ucrania, según datos del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).