Con más de 100 años de trayectoria a sus espaldas, Grupo Laura Otero es uno de los referentes del sector de la distribución eléctrica en Extremadura. Empresa familiar con sede en Miajadas, en la actualidad cuenta con 220 KW de energía fotovoltaica sobre cubierta instalados. El año pasado puso en marcha una planta fotovoltaica en Escurial. Su consejero delegado, Eugenio Manzano, explica que a lo largo de la trayectoria del grupo ha habido que reinventarse y «echarle imaginación». Ahora Laura Otero trata de diversificar su oferta con sistemas de digitalización de riegos para la agricultura.
-¿Cuánta potencia fotovoltaica instalada tiene el grupo Laura Otero?
-El grupo Laura Otero tiene instalados 220 KW de energía fotovoltaica sobre cubierta correspondientes al Real Decreto 661/2007, unos entraron en funcionamiento en el 2008 y otros en el año 2013; y 1,92 MW que han entrado en funcionamiento hace 5 meses y que operan en el mercado libre
-¿Cómo está funcionando la planta fotovoltaica de Escurial?
-La planta fotovoltaica de Escurial, que es la que decíamos antes de 1,92 MW, está a pleno rendimiento desde el 15 de octubre del pasado año, como instalación nueva, está funcionando perfectamente en estos momentos.
-¿Cuáles son sus próximos proyectos en energías renovables?
-Actualmente tenemos varios proyectos en cooperación con otros socios de diferentes partes de España, en este tipo de negocios, que son de altas inversiones, no podemos afrontarlas solos, debemos de unirnos varios socios con la misma visión de negocio.
-El grupo ha puesto en marcha Miajadas Telecom ¿cómo está funcionando esta diversificación a la digitalización de la agricultura?
-Las mimbres están, sólo falta que podamos vender el producto de nuestro diseño e innovación tecnológica; no son estos buenos momentos para este tipo de sistemas, máxime cuando es posible que este año no se pueda regar, o si se puede sea con restricciones en la superficie, lo cual llevará a que los agricultores se planteen si hacer inversiones este año o cuando todo esté más despejado y calmado.
-¿Cómo ha logrado superar Laura Otero los cien años de trayectoria en un sector tan complejo como el de la energía?
-Con imaginación y sacrificio; desde los comienzos de la actividad de distribución de energía eléctrica hubo muchas necesidades, hay que tener en cuenta que a principios del pasado siglo veníamos de varias crisis, políticas y económicas, la pérdida de Filipinas y Cuba en 1898; y posteriormente las crisis mundiales con la I Guerra Mundial entre 1914 y 1918, la Gran Depresión en EE. UU. del año 1929, la Guerra Civil en España, la II Guerra Mundial, etcétera.., hasta nuestros días. En todos estos períodos escasearon las materias primas y en algunos casos era imposible hacerse de ellas, incluso actualmente tenemos estas mismas circunstancias, con falta de microchips y otros elementos de primera necesidad para el desarrollo de componentes electrónicos. Pues con todas estas circunstancias ha habido que echarle mucha imaginación y pasar bastantes penurias hasta llegar a nuestros días, reinventándonos en un sector tan complicado y tecnológico como es el de la distribución de energía eléctrica, donde la digitalización de todos los procesos nos marca diariamente para dar la máxima calidad a los usuarios de la energía eléctrica.
