Sin aire acondicionado y sin agua, en plena ola de calor. Así tuvieron que viajar ayer algunos de los pasajeros que iban en el tren de media distancia Badajoz-Madrid, que había partido desde la capital pacense a las 16.45 horas. Según ha podido saber este diario, se produjo una avería al saltar el térmico en el último de los seis vagones del convoy, que fue el que se quedó sin el aire acondicionado. Un viajero accionó la alarma y el tren se detuvo en la estación toledana de Oropesa. El térmico se reparó en Oropesa y a la altura de Talavera el coche donde se produjo la incidencia ya estaba con el aire acondicionado con un funcionamiento normal.

Aprovechando la parada, varios viajeros reclamaron al maquinista que no reanudase la marcha hasta que no se hubiese reparado el aire acondicionado, que fue lo que se hizo. Los usuarios no tuvieron opción de comprar agua en las máquinas vending de la estación de Oropesa porque dependen de la adjudicación a una concesionaria que aún no se ha resuelto.

Desde Renfe han señalado que "una incidencia técnica provocó el uso indebido del aparato de alarma por parte de un viajero". "Una vez solucionada la incidencia por el personal de Renfe, el tren pudo continuar la marcha hasta destino, donde llegó con 34 minutos de retraso", indican. Por último, apuntan que a los 210 viajeros se les mantuvo informados y podrán reclamar la devolución de la parte del importe del billete.

El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha señalado que la avería del aire acondicionado en un tren Madrid-Badajoz, ha puesto de manifiesto que "aún quedan cosas por mejorar y las vamos a seguir mejorando". La avería se produce apenas unos días antes de la puesta en servicio de la nueva línea de altas prestaciones del tramo entre Plasencia y Badajoz.