Sin duda, habremos notado un descenso en las temperaturas esta semana, especialmente en comparación con la ola de calor que acaba de concluir en la que, especialmente Extremadura, sufrió las constantes de más de 43 grados llegando incluso a 46 en algunas zonas de la región.

Badajoz fue la provincia más caliente alcanzando los 46 en algunas de sus localidades, récord histórico que no ocurría desde 2018. Mientras que Cáceres alcanzó los 44 grados en algunas zonas.

El clima que estamos percibiendo en estos días se debe a la Dana (Depresión Aislada en Niveles Altos) que está entrando por el noroeste del país y que hará del territorio un lugar más fresco en los próximos tres a cuatro días.

Lo que ha ocurrido exactamente es que la Dana del atlántico ha desplazado el anticiclón que ha provocado estas híper altas temperaturas y como consecuencia tenemos una brisa en movimiento que refresca la geografía extremeña y la española en general.

De momento, podemos disfrutar de esta pausa, pero como indica la palabra, parece ser solo una pausa, pues desde la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), se prevé un aumento de las temperaturas nuevamente para el final de esta semana.

Aun con cifras por confirmar, podríamos estar hablando de una nueva ola de calor comenzando este viernes, y ubicando nuevamente los termómetros por encima de los 40 grados.