El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana saca a licitación pública el nuevo contrato de la Obligación de Servicio Público (OSP) de los vuelos a Madrid y Barcelona desde Badajoz por un importe de 8,8 millones de euros para dos anualidades, un 25% más que el anterior para recuperar las cinco rutas semanales a Madrid que operaban antes de la pandemia de coronavirus.
Según el anuncio publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), las empresas interesadas podrán ofertar hasta las 15.00 horas del próximo 2 de septiembre en la dirección general de Aviación Civil, y el tipo de procedimiento será abierto acelerado. En esta línea, indicar que está previsto que la fecha para el inicio del servicio sea el próximo 28 de octubre, ya que cumple la concesión actual con Air Nostrum.
A través del nuevo contrato, el aeropuerto de Badajoz volverá a contar con 30 vuelos semanales de ida y vuelta: 11 a Madrid, frente a los seis actuales, y los cuatro a Barcelona. Cabe recordar que el Consejo de Gobierno aprobó el pasado mes de julio una adenda de modificación del convenio de la OSP con el Ministerio para elevar la compensación máxima anual que recibirá la nueva adjudicataria, que pasa de los 3,5 millones de euros a 4,4.
Cabe indicar que no se contempla la prórroga del contrato, salvo causas de interés público recogidas en la Ley. Aunque el Gobierno central fue el encargado de declarar en 2018 la OSP de los vuelos y es el que se encarga del procedimiento de licitación para que una empresa garantice estos servicios, quien asume el coste es el Ejecutivo autonómico.
Las frecuencias
En el caso de los vuelos a Madrid, el pliego de prescripciones técnicas publicado en la plataforma de contratación estatal recoge que el operador tendrá que programar un mínimo de 11 frecuencias semanales para un total de 54.000 asientos anuales. La distribución será dos frecuencias diarias de lunes a viernes (salvo en agosto) y una frecuencia diaria de lunes a viernes el mes de agosto, y todos los domingos.
En cuanto a los horarios, salvo en el mes de agosto, de lunes a viernes, la primera frecuencia deberá llegar a Badajoz entre las 08.00 y 09.00 hora local, con el vuelo de vuelta saliendo de Badajoz entre las 09.00 y las 10.00 horas. La segunda frecuencia, así como la frecuencia del domingo, deberán salir de Madrid entre las 17.30 y las 18.30 hora local, con el vuelo de vuelta saliendo de Badajoz entre las 19.00 y las 20.00 horas.
Durante el mes de agosto, las compañías adecuarán libremente los horarios del servicio a la demanda real del mercado. En cualquier caso, los horarios de operación se adaptarán a los horarios de apertura de los aeropuertos correspondientes.
Por su parte, la ruta Badajoz-Barcelona tendrá un mínimo de cuatro frecuencias semanales (ida y vuelta) durante todo el año, con una capacidad de 20.000 asientos anuales. En este caso, no se especifican los horarios, sino que las compañías adecuarán libremente los días de operación y los horarios a la demanda real del mercado, siempre dentro de los horarios de apertura de los aeropuertos correspondientes.
Reacciones
La presidenta del PP de Extremadura, María Guardiola, ha manifestado este lunes que espera que la licitación del contrato "sea una realidad y no un simple papel mojado", tal y como "desgraciadamente estamos viendo con el resto de infraestructuras", después de comprobar la "estafa" del tren de alta velocidad. "Lo que me gustaría es no verlo con el avión", ha subrayado. Pese a ello, ha indicado que "la valoración de todas las cosas que mejoren nuestras comunicaciones e infraestructuras, siempre va a ser positiva".
Por su parte, el secretario de Ideas, Programas y Acción Electoral del PSOE de Extremadura, Juan Ramón Ferreira, ha dicho que la licitación evidencia la "apuesta clara" de su formación por mejorar el transporte público en la región. "Ese acuerdo trae un 25% más de inversión para esos vuelos... Eso marca una vez más cómo hay una apuesta clara por mejorar los servicios de transporte público, tanto por avión como por tren como por carretera en esta región", ha afirmado. "Creemos que ese es el camino real, el conseguir que sigamos invirtiendo para poder hacer sostenibles esos vuelos", ha apuntado.
