"Nosotros, como tantas otras personas en nuestra situación, tenemos un sueño: vivir de forma independiente. Queremos ser los arquitectos y protagonistas de nuestra propia vida. En el modelo residencial en el que vivimos nos dan todo hecho e incluso piensan por ti demasiadas veces. Juntos hemos aprendido que queremos crear nuestro hogar, elegir quién nos asiste, pero sobre todo cuándo y cómo hacerlo. Decidir cuándo nos duchamos, qué y cuándo comemos, cómo nos aseamos… Cosas muy básicas que ahora mismo no podemos elegir". Con estas palabras José López y Luisfer Sánchez-Moreno explican su iniciativa para pedir una bolsa de viviendas sociales para personas con discapacidad.
Esta pareja extremeña es la impulsora de la Asociación VIVA (Vida Independiente en Viviendas Asistidas), que ha lanzado una campaña a través de la web Change.org que ya ha logrado casi 1.400 firmas.
"Creemos que la vivienda y la asistencia personal (la figura laboral que nos asiste en nuestro hogar, trabajo y diversas situaciones de la vida cotidiana, bajo nuestras directrices haciéndolo todo tal y como lo haríamos nosotros mismos) son el binomio indispensable y deben ser los pilares sobre los que se construya un modelo de vida independiente realista. En definitiva, lo que estamos pidiendo es lo que la mayoría de las personas tiene, poder vivir en nuestro propio hogar sin ser excluidos socialmente", afirman.
La pareja recuerda que "la convención sobre los derechos de las personas con discapacidad recoge de manera clara y explícita el derecho a una vida independiente". Por eso, desde VIVA exigen: "No podemos ser siempre tratados como ciudadanía de segunda, llegó la hora de empoderarnos y tomar el control de nuestras vidas".
