Renfe ha pedido a Talgo, proveedor del material rodante y mantenedor de los trenes Alvia que prestan servicio en Extremadura, que realice una revisión adicional al tren que ayer jueves realizó el servicio Madrid-Badajoz. El convoy, que finalmente quedó estacionado en Cáceres, deberá ser intervenido por el personal de Talgo para solucionar la avería de disyuntor que ha ocasionando la demora en el servicio Alvia.

El Alvia Madrid-Badajoz con salida a las 16.18 horas de la estación de Chamartín registró una incidencia técnica que le ha obligado a realizar un reseteo de equipos en el tren. Por este motivo, y por el cruce posterior con otra circulación, el tren circuló a su salida de Monfragüe con una demora aproximada de 50 minutos.

Finalmente, a su llegada a Cáceres, se efectuó el transbordo de los viajeros a otra unidad Talgo de reserva activada por Renfe para garantizar la continuidad del viaje con la menor afectación posible a los viajeros.

Renfe mantuvo informados a los clientes mediante los canales de información al viajero y a través del personal de a bordo. Durante la espera se les ofreció agua y refrescos.

En cumplimiento con el compromiso de puntualidad de este servicio, se reintegrará el 100% del importe del billete a los viajeros.

Ayer jueves por la mañana, el servicio de media distancia tampoco funcionó bien. El tren que partía a las 6.16 horas desde Cáceres llegó a la estación madrileña de Atocha con 35 minutos de retraso: a las 10.51 horas en lugar de a las 10.16 horas.