el ministerio de transición ecológica da el visto bueno a la modificación de iberdrola

La fotovoltaica Pizarro reubica los 32 MW que paralizó por el sisón

La mayor planta de Europa, entre Aldeacentenera y Torrecillas de la Tiesa, no se ejecutó al completo al afectar a una zona de nidificación. Son cien mil paneles y se instalarán en 64 hectáreas de una parcela anexa

La planta fotovoltaica Francisco Pizarro, durante su ejecución.

La planta fotovoltaica Francisco Pizarro, durante su ejecución. / EFE

La mayor fotovoltaica de Europa, la planta Francisco Pizarro, se podrá completar en los próximos meses con 32,7 megavatios (MW) que no se pudieron instalar inicialmente porque los paneles estaban previstos en una zona sensible medioambientalmente porque nidifican allí los sisones (tetrax, tetrax). El Ministerio de Transición Ecológica ha dado el visto bueno a la propuesta que ha presentado la promotora de la instalación, Iberdrola, para reubicar esos paneles en otra zona contigua y considera que «no es necesario el sometimiento al procedimiento de evaluación ambiental ordinaria del proyecto», según recoge este lunes el BOE; eso da vía libre para iniciar los trabajos para completar la planta.

La Dirección General de Política Energética y Minas recibió el pasado verano la solicitud de Iberdrola para iniciar el procedimiento de evaluación de impacto ambiental de la modificación del proyecto solar Francisco Pizarro, de 482 MW de potencia instalada, que se ha tramitado como una nueva fase (Pizarro Fase III) situada junto a lo ya ejecutado. Hay que recordar que la planta Francisco Pizarro, situada entre los términos muncipales de Torrecillas de la Tiesa y Aldeacentenera, se aprobó en noviembre de 2020 con una autorización de 589 megavatios de potencia máxima (MWp). En todo caso, durante la ejecución del proyecto se redujo la potencia inicial porque aparecieron restos arqueológicos en la zona (se localizaron una veintena de aforamientos rocosos con manifestaciones de arte rupestre, y tres yacimientos arqueológicos datados entre la Edad Antigua y la época medieval) y se detectó una zona de reproducción del sisón en los terrenos que se pretendían usar. Iberdrola desistió entonces de la implantación prevista en esa zona tras un acuerdo con SEO/BirdLife y eso es lo que ahora se va a reubicar «en otra zona contigua a la planta» ya existente para completar la instalación fotovoltaica, indican desde Iberdrola.

Los trabajos no se podrán iniciar hasta al menos hasta el 15 de julio para no dañar a las especies de la zona

Se instalarán 37,2 nuevos MW con una potencia máxima de 36,2; unos cien mil paneles, que ocuparán 64,5 hectáreas en una zona de pastizal «dentro de los terrenos que ya estaban autorizados», añaden. 

Medidas correctoras en la zona de actuación

La Dirección General de Política Energética y Minas no prevé impacto sobre espacios protegidos porque las infraestructuras proyectadas no están dentro de la Red Natura 2000; pero sí impone a la empresa una serie de restricciones a la hora de realizar los trabajos, entre ellas la imposibilidad de iniciar los trabajos de construcción entre el 15 de febrero y el 15 de julio, «por ser los meses de mayor sensibilidad para las especies reproductoras de la zona». Además la empresa tendrá que construir en esos terrenos cinco charcas y deberá garantizar una superficie de dos hectáreas de pastos húmedos para las poblaciones de aves esteparias; y también tendrá que cerrar un acuerdo con una oenegé para «dar continuidad a la reserva de alimentación, con gestión de pastos sostenibles para la alimentación del cernícalo primilla, la conservación del sisó o la avutarda», con una extensión del 35% de la planta.