El PSOE rebaja a la mitad el impuesto a los grandes propietarios de viviendas vacías

El PSOE extremeño va a rebajar a la mitad el impuesto a los grandes propietarios de casas vacías, una de las principales novedades que introduce la nueva ley de vivienda que se ha aprobado este jueves en el último pleno de la legislatura. El texto ha salido adelante solo con el voto de los socialistas, ya que Unidas por Extremadura, con quien inicialmente se pactó este tributo en 2019, se abstenido al entender que el texto se queda corto. "Llega tarde y llega mal, porque tiene más puertas de salida que de entrada", ha dicho su portavoz, Irene de Miguel.

El tributo en cuestión gravará a las personas jurídicas (entidades bancarias, sociedades y fondos de inversión, fundamentalmente) con más de cinco viviendas en propiedad que permanezcan vacías sin causa justificada durante un periodo acumulado de un año. La Junta calcula que afectará a unas 4.000 viviendas con un impacto en la recaudación de unos cuatro millones de euros que ahora se rebajarán a dos.

El texto inicial propone aplicar un tipo progresivo en función de la superficie (desde 7,5 euros por metro cuadrado de vivienda vacía a partir de 500 a un máximo de 22,5 euros para más 4.000) y ahora se plantea mantener la misma escala, pero reduciendo las tarifas a la mitad: desde 3,75 euros hasta 11,25. De esta forma, un contribuyente con 10.000 metros cuadrados en propiedad tendrá que abonar 97.000 euros, frente a los 194.000 que se preveían inicialmente.

El cambio se recoge en las 22 enmiendas parciales que el PSOE ha formulado al texto siguiendo las recomendaciones del Consejo de Estado y la rebaja se justifica en el escenario económico actual y la subida del euríbor. Además, vía enmienda, el PSOE también aclara que habrá que abonar el tributo aunque solo una de las cinco viviendas esté vacía y se excluye del gravamen a las denominadas "zonas de baja demanda", para no penalizar a los pequeños municipios. Por otra parte, se abre la puerta a que el tributo se pueda modificar en las leyes de presupuestos.

Unidas y el PP se abstienen

Al texto se han presentado además 17 enmiendas de Unidas por Extremadura, 15 del PP y nueve de Ciudadanos, de las que el PSOE ha transaccionado algunas en aras a un acuerdo que finalmente no ha sido posible. "Es una ley que mejorará la vida de los extremeños, que viene a solucionar problemas y que garantizará la función social de la vivienda", ha defendido la diputada socialista Teresa García, que ha reconocido que esperaban más apoyo de Unidas ya que el impuesto a las viviendas vacías se pactó con Podemos para la aprobación de la ley de vivienda de 2019.

"Nos han anunciado a bombo y platillo la modificación de una ley que trae poca o ninguna novedad", ha replicado la líder de la formación morada, Irene de Miguel. A su juicio, el impuesto a los grandes propietarios "llega tarde y mal (se debería haber puesto en marcha 18 meses después de la aprobación de la ley de 19) porque tiene más puertas de salida que de entrada". Entre otras cuestiones, ha criticado la rebaja del impuesto a la mitad, que se exencione a los pisos destinadas a apartamentos turísticos (que considera "una gran amenaza" para el acceso a la vivienda) y que se considere que una vivienda deja de estar vacía con que se alquile solo tres meses al año. "Así no se fomenta el alquiler asequible", ha replicado De Miguel, que se ha mostrado "dolida por la falta de valentía y creatividad" de las medidas del PSOE en materia de vivienda.

También muy críticos con la nueva ley han sido el PP y Ciudadanos, aunque en este caso al entender que se excede en su objetivo de garantizar el acceso a la vivienda con un impuesto "injustificado" que descarga toda la responsabilidad en los propietarios. "¿Teme Vara perder las elecciones y necesitar del apoyo de Podemos? Solo así se entiende que desesperados se abracen a los morados en este dislate contra la propiedad privada", ha dicho el diputado del PP Saturnino López Marroyo.

Por su parte, para el portavoz de Ciudadanos, Joaquín Prieto, se trata de una ley "miserable y oportunista". "Para edulcorarla mezclan fines sociales con recaudatorios e intervencionistas, propios del socialismo acomodado de la región", ha dicho.

Sus enmiendas iban destinadas a eliminar un impuesto que consideran injustificado, pero pese a las críticas, ambos grupos han reconocido que sí estaban de acuerdo con otras medidas que recoge la ley como el mecanismo de protección frente a los desahucios o el fondo de garantía para avalar a los jóvenes que quieran comprar una vivienda pero tengan dificultades para acceder al crédito. Por ello, tras aceptar el PSOE cuatro de las enmiendas del PP vía transaccional, los populares se han abstenido. Cs sí ha mantenido su voto en contra.

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