El Periódico Extremadura

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ERA UNA DEMANDA DE LOS MÉDICOS DE ATENCIÓN PRIMARIA

La alerta analítica, «vital» para enfermedades graves

Consiste en dar aviso al médico desde el laboratorio si los resultados sufren cualquier tipo de alteración, para que pueda prescribir un tratamiento en horas 

«Antes se usaba el fax y dependía de si se veía o no, se podían tardar días», dicen los facultativos

Muestras de sangre que analizan los laboratorios. EL PERIÓDICO

El médico de Atención Primaria prescribe una analítica de control a su paciente (la recomendación es realizarse al menos una al año). Este se la hace y espera una semana para pedir cita, tiempo que suelen tardar en completarse los resultados. Eso en el mejor de los casos porque muchas veces, si el usuario no tiene ningún problema de salud, pueden pasar meses hasta que vuelve a pedir la cita para conocer los resultados de esta prueba. Ese tiempo no importa si realmente no padece ninguna enfermedad, lo que ocurre es que muchas veces esas analíticas de control revelan padecimientos desconocidos. Algunos de ellos graves. «Puede que los resultados nos den un valor de 40.000 en plaquetas, lo que puede provocar una hemorragia masiva en el paciente», apunta Evelio Robles, médico de Atención Primaria en Cáceres y secretario del Colegio de Médicos de esta provincia.

Hasta ahora, cuando esto sucedía, también se alertaba al médico de una anomalía en los resultados, sin embargo este aviso no se realizaba por los cauces más rápidos, pues el mecanismo utilizado era el fax. De tal manera que desde el laboratorio remitían un documento a través de este canal y su recepción dependía de que los administrativos lo consultaran y lo hicieran llegar hasta la consulta del médico en cuestión. «La alerta aparecía en el fax mezclada con muchas cosas y se podía extraviar. Además implicaba pasar por muchas manos por lo que muchas veces o no llegaba o se tardaban días. El fax no era una vía ni garantista ni segura», reconoce Evelio Robles.

A lo que se unen, además, los problemas que presenta esta vía en cuanto a la protección de datos de los pacientes, ya que su información quedaba expuesta a la vista de todos en el fax: «No tiene nadie por qué saber lo que te pasa. Como mínimo en el fax ya lo veía el administrativo», subraya este médico.

Para dar solución a esta situación la Consejería de Salud y Servicios Sociales ha puesto en marcha lo que ha denominado ‘Alerta analítica’ y que consiste simplemente en un sistema que garantiza el aviso de estas incidencias de forma inmediata al médico responsable de la atención del paciente al que ha prescrito los análisis, tanto de sangre como de orina. Se trata de una aplicación a través de la cual el laboratorio puede dejar una alerta a este facultativo directamente en su ordenador, donde se le advierte de los valores alterados en la prueba de un determinado usuario. El médico lo recibe a modo de mensaje urgente.

Esquema de cómo funciona la nueva herramienta. JUNTAEX

¿Y si el médico no está en la consulta?

Además, en caso de que el especialista no esté en su consulta, el sistema está preparado para alertar también al laboratorio de que el mensaje no ha sido consultado. De tal manera que si en unas horas no se ha recibido un feedback por parte del facultativo directamente la alerta se remite al coordinador y al personal administrativo del centro de salud para que puedan informar a otro médico de esta situación. «Si la analítica la hemos pedido por la mañana podemos tener la alerta a última hora del día. En unas horas podemos poner tratamiento al paciente. Es importante porque hay situaciones que requieren una actuación inmediata para prevenir un problema mayor», incide este facultativo cacereño.

Esta herramienta era una demanda de los médicos de Atención Primaria en la región y ha sido uno de los primeros proyectos puestos en marcha por la titular de la cartera de Salud, Sara García, después de reunirse con los profesionales. «Lo que hemos conseguido es que el médico analista, cuando ve una situación que sale de ojo, como una leucemia, una infección de orina que no es por la que ponemos tratamiento habitualmente y el paciente no está cubierto, se ponga un diálogo al médico para alertarle. Y que no dependa de que ese médico no esté en la consulta y no se entere y haya que esperar a que el paciente pida cita a los dos meses para ver esos resultados», explica la consejera. 

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