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Apagón

Extremadura suspende las clases este martes, pero los centros educativos abrirán

La Junta señala que esta medida se adopta con carácter preventivo "para evitar riesgos asociados a los desplazamientos de los alumnos y el personal educativo durante esta situación de emergencia"

Un grupo de estudiantes

Un grupo de estudiantes / Europa Press

La Junta de Extremadura ha decidido suspender este martes las clases en todas las etapas educativas, pero los centros escolares se mantendrán abiertos tras la caída masiva de la red eléctrica.

Comunicado de la Junta

Comunicado de la Junta / Juntaex

"A fin de evitar la asunción de riesgos graves para la población y los bienes durante esta situación de emergencia que pudiera producirse fundamentalmente con motivos de los desplazamientos se estima necesario suspender toda la actividad lectiva de la comunidad educativa en el ámbito de Extremadura por la presente situación de emergencia".

En una resolución firmada por la consejera de Educación, Mercedes Vaquera, y el consejero de Presidencia, Abel Bautista, la administración regional explica que la caída masiva de la red eléctrica durante la jornada de ayer "implica situación de riesgo para personas, bienes y medio ambiente", y recuerda que la comunidad ha activado a las 14 horas el Plan Territorial de Protección Civil y la situación de emergencia en el nivel 2 y el Gobierno estableció el nivel 3 tras la solicitud de la comunidad. "Esta medida de adopta con carácter preventivo, para evitar riesgos asociados a los desplazamientos de los alumnos y el personal educativo duratne la situación de emergencia", detalla la administración.

Desde la Junta recomiendan a las familias seguir la información oficial a través de los medios de comunicación y canales institucionales y agradecen la colaboración de la comunidad educativa.

Vuelta a las tizas en la era de las pizarras digitales

Durante la jornada de este lunes y tras el apagón pasadas las 12.30 horas, los centros educativos prosiguieron con la jornada lectiva sin incidentes, aunque los docentes tuvieron que adaptar sus clases. Sin conexión a Internet ni pizarras digitales, maestros y profesores volvieron a sacar las tizas y dar protagonismo a las pizarras tradicionales que siguen presentes en la mayoría de las aulas detrás de las digitales. También hubo padres que ante la incertidumbre decidieron recoger a sus hijos antes de las aulas.

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