Asaja cifra en 43 millones de euros las pérdidas para el sector tabaquero por el veto al dicloropropeno

Asaja Extremadura cifra en más de cuarenta millones de euros la pérdida de ingresos que sufrirá el sector tabaquero este año por la prohibición de usar el 1,3-dicloropropeno para luchar contra las plagas. Esta organización agraria calcula que no poder recurrir a este producto fitosanitario para el control de nematodos, hongos e insectos en el suelo se traducirá en una merma de rendimiento de más de 1.200 kilogramos por cada hectárea cultivada. Una disminución en la cosecha que, multiplicada «por 8.000 hectáreas, y por 4,52 euros/kilogramo» de precio de venta se traducirán en «43,4 millones de euros» menos percibidos por estos profesionales, ha estimado este jueves en Cáceres el presidente de Asaja Extremadura, Ángel García Blanco. Igualmente, ha criticado que este sea el segundo año consecutivo en el que los tabaqueros de Extremadura (la región concentra la práctica totalidad de este cultivo en España) tengan que sufrir este «agravio comparativo» frente a los de Italia, principal país productor en Europa, que sí tienen autorizado este compuesto. 

Este condicionante, unido «al exceso de agua» hará que posiblemente «no se va a poder llegar a los 32 millones de kilos que hay actualmente contratados» esta campaña, ha pronosticado. «Podíamos estar en torno a los 4.000 kilos por hectárea, pero creo que difícilmente vamos a llegar a los 2.700», ha avanzado el presidente de Asaja Extremadura, que ha lamentado además que esta situación pueda producirse en un contexto en el que «hay una demanda bestial de tabaco español», que ha atribuido a que las multinacionales «se han dado cuenta de que es el mejor» para los dispositivos de tabaco calentado y a que «tiene un control sanitario» y «agroambiental» y una trazabilidad que es «la más grande de todo el mundo».

Cereales

Por otro lado, tras la protesta de este miércoles frente a la sede del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) para pedir ayudas directas al sector cerealista que atenúen una crisis de precios que atraviesan los productores y que se ha visto agravada por el alza de las importaciones, García Blanco ha incidido en «la inacción del desaparecido ministro de Agricultura», Luis Planas, «del que se desconoce su paradero y que para mayor ruina de los agricultores permite la importación masiva de cereal ucraniano, en manos de oligopolios rusos, sin arancel alguno a precios por debajo de los 190 euros por tonelada, cuando aquí sabemos que los costes de producción giran en torno a los 250 euros». Una política comercial que se une a que «para mayor castigo» del sector sí que se imponen aranceles a los fertilizantes que llegan de Rusia y Bielorrusia «para que a los agricultores les salga más cara la siembra».

Apicultura

Asimismo, el máximo responsable de Asaja Extremadura ha efectuado «una petición» a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, «a la que se le ha olvidado la rebaja de los módulos» a la apicultura. Un sector «actualmente en la ruina» a causa de la «importación fraudulenta de siropes que suplantan a las mieles» y «de problemas sanitarios como la varroa», y al que se le aplica «un módulo descabellado del 26%, frente al 13% por ciento que tuvo el pasado año».