Queso Ibores advierte de la falta de relevo generacional

La Denominación de Origen Protegida Queso Ibores participa un año más en la Feria Nacional del Queso de Trujillo donde exhibe la excelencia de este producto amparado con sello de calidad. El Queso Ibores es elaborado por cuatro queserías con la leche de cabra de las razas retinta, verata y serrana procedente de 15 ganaderías. Anualmente se certifican 75.000 kilos de Queso Ibores.

Su director técnico, Javier Jiménez, recuerda que cuando la denominación de origen empezó formaban parte de ella 150 ganaderos. La causa del adelgazamiento del número de profesionales que producen leche para Queso Ibores DOP está en la falta de relevo generacional en el agro, especialmente en el ordeño en extensivo. «O se ofrecen alicientes para que la gente joven vea atractivo tener una ganadería en extensivo o podemos perder esta actividad», señala. El problema de la ausencia de relevo generacional no es exclusivo de la ganadería caprina, aunque es más agudo en ella, porque el manejo del animal es más complicado. «Hay que ordeñar sábados y domingos, por ejemplo, y eso hace que el trabajo sea muy exigente», añade. 

«El problema no se encuentra en la calidad del queso, nI en la venta, ni en la comercialización, sino en la materia prima, la leche, que cada vez escasea más», explica el director técnico.

La Denominación de Origen Queso Ibores realiza una importante labor promocional a lo largo del año, estando presente en las principales ferias y encuentros especializados, como Salón del Gourmets, San Sebastián Gastronómika o Galicia Forum Gastronómico, entre otros. H