Badajoz dejó claro ayer en la Feria Internacional del Turismo que sus desayunos la convierten en toda una referencia gastronómica. Lo hizo de la mano de tres grandes profesionales en el nuevo Espacio Gastronómico que se ha habilitado en el estand extremeño en Fitur.

Manuel Corbacho, presidente del club de producto Saborea Badajoz, elaboró dos tapas exquisitas con productos de la zona: un cuscús con espárragos trigueros con una presa ibérica de bellota y salsa de ciruelas, así como un ravioli de papada ibérica de bellota con salmorejo y crujiente de jamón.

El otro de los expertos que enseñó lo que era un buen desayuno pacense fue David Cortés, de la empresa Floco Original Coffee, que se dedica a tostar cafés de especialidad arábica en Badajoz. Preparó un café muy especial con la variedad Gheisa, procedente de la finca El Porvenir.

Finalmente, Pepe Alba, cortador profesional de jamón explicó a los presentes que las tostadas más solicitadas son las de aceite con jamón y tomate. «En función de las calidades del jamón podemos utilizar un tipo de aceite u otro. Para un ibérico se necesita un aceite potente, afrutado para acompañarlo».

A la demostración en vivo de cocina asistieron muchos profesionales, e incluso el propio alcalde de Badajoz, Francisco Javier Fragoso, acompañado de sus concejales. Los presentes pudieron degustar tostadas con cachuela, paté, café, y otras delicatesen de la provincia.

La oferta gastronómica de la ciudad tiene a su disposición una despensa natural única, una alacena cargada de productos autóctonos de extraordinaria calidad sobre la que se asienta una cocina de base tradicional, que no pasa desapercibida para nadie.

La variedad de la actual cocina pacense tiene su origen en tres vertientes culinarias tradicionales, la cocina de la dehesa, la cocina pastoril y la cocina rayana, las tres ligadas al entorno y a los recursos naturales que éste produce. El próximo lema para Saborea Badajoz: «Desayunar en Badajoz es capital».