La tensión entre Irán y Estados Unidos y el Reino Unido crece cada día que pasa. El régimen de Teherán anunció ayer que tenía en su poder a 17 iranís detenidos en los últimos meses y a los que acusa de trabajar como espías para la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos. Teherán añadió que algunos de los arrestados han sido ya condenados a muerte.

Poco después de salir a la luz pública la información de Teherán, el presidente de EEUU, Donald Trump, colgó uno de sus habituales tuits en el que calificó de «totalmente falsas» las afirmaciones de Teherán. «Los informes de que Irán ha arrestado a espías de la CIA son totalmente falsos, no hay ni una pizca de verdad», escribió el mandatario. «Más mentiras y propaganda presentado por un régimen religioso que está miserablemente en fallida y no sabe qué hacer», agregó. «Su economía está muerta y empeorará. Irán es un desastre total», concluyó.

El jefe del antiespionaje del Ministerio de Inteligencia de Irán, cuyo nombre no es público, dijo en una rueda de prensa que aquellos que «habían colaborado consciente y deliberadamente (con la CIA)» fueron entregados al Poder Judicial y condenados a muerte o a «largas» penas de prisión». Según la versión iraní, los 17 detenidos no estaban en contacto entre ellos sino que cada uno se comunicaba con un agente de la CIA, y eran empleados en «centros importantes del país», como por ejemplo nucleares, explicó el agente.

La CIA logró reclutar a los iranís en conferencias científicas celebradas en África, Asia y Europa y por las redes sociales e internet, prometiéndoles dinero y visados o residencia en EEUU. Un documental sobre el presunto espionaje de la CIA en Irán fue trasmitido ayer en la televisión estatal iraní. Pretendía mostrar a un oficial de la CIA reclutando a un hombre iraní en los Emiratos Árabes Unidos.

ESPIONAJE CIBERNÉTICO / La información se ha hecho pública después de que el pasado 17 de junio Teherán anunciara que había acabado con una red de espionaje cibernético y acusara a EEUU de tener un largo historial de ataques cibernéticos contra otros países.

La tensión entre EEUU e Irán ha ido en aumento desde que el año pasado EEUU decidiera retirarse del acuerdo nuclear de 2015 y volver a imponer sanciones económicas al régimen de Teherán. El conflicto se ha extendido al Golfo Pérsico, donde en los últimos meses se han producido ataques a barcos, el derribo de drones y la captura el pasado viernes por parte de Irán de un petrolero británico en el estrecho de Ormuz después de que la marina británica tomara un petrolero iraní el 4 de julio en el estrecho de Gibraltar.

El ministro de Exteriores británico, Jeremy Hunt, tildó ayer de «piratería estatal» la retencion del petrolero británico por parte de las autoridades iranís y abogó por la creación de una entidad liderada por Europa que tenga como misión proteger y garantizar los barcos que naveguen por el Estrecho de Ormuz.